La Galerna
·14. November 2024
La Galerna
·14. November 2024
Ha nacido de blanco puro y corazón caliente porque lleva nueve meses escuchando, a través del vientre de su madre, que rendirse jamás es una opción.
Ha nacido generoso, valiente y tenaz, tres virtudes de las que su padre más admira y de las que le hablaba muy cerquita, enunciándole con detalle gestas únicas y describiéndole mitos del balón que todavía desconoce, pero que marcarán su vida y le regalarán grandes sonrisas.
Ha nacido feliz porque ya ha ganado una batalla. Escoger al Real Madrid es admitir la derrota, pero jamás entregar la espada. Ya sabe, porque viene atento de fábrica, que el optimismo convierte los desafíos en conquistas ejemplarizantes.
Ha nacido, reconozcámoslo, en un momento difícil, pero ¿cuándo roza el Madrid la tranquilidad si en cada celebración de los éxitos se conjura para el siguiente? Ya ha escuchado las primeras críticas, ora fruto del rencor, ora de boca de los derrotistas, a las que tiene reservadas el mismo destino de sus pañales usados.
Ha nacido creyendo que los milagros no son inalcanzables. Porque, si inverosímil es cada llegada a este mundo que nos empeñamos en destruir, no resultan menos extraordinarios los arrebatos del Bernabéu, las remontadas que transforman catástrofes predecibles en prodigios asombrosos.
Ha nacido con genio y picardía desde su propio nombre, memoria de la epopeya bíblica en la que un héroe de humilde origen aceptó el envite del más bravucón de los filisteos y logró derrotarle con un ataque inesperado que significó la victoria completa y total de su pueblo.
Ha nacido en una fecha de guarismo talismán para el madridismo, el siete, y a escasas horas de coincidir su día con el del custodio eterno del ADN madridista, Juan Gómez, Juanito, por lo que queda bendecido por el corazón más grande que jamás haya dado la historia del fútbol.
Ha nacido un madridista. Y nada más.
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