Revista La Liga
·17. Januar 2025
Revista La Liga
·17. Januar 2025
Hubo otra polémica victoria del Real Madrid, que se vio favorecido por errores arbitrales. Jugando como local, el equipo ‘merengue’ derrotó 5-2 al Celta de Vigo en los octavos de final de la Copa del Rey.
Pero, más allá de lo que diga el marcador final, los dirigidos por Carlo Ancelotti sufrieron mucho. Luego de ir ganando 2-0, se dejaron empatar por el equipo gallego y tuvieron que ir a la prórroga. Allí marcaron tres goles para sellar una goleada que disimula las falencias que mostraron para administrar su ventaja inicial.
La polémica arbitral empezó en el gol con el cual el Madrid abrió el marcador. El arquero local Andriy Lunin derribó en su área a Williot Swedberg y el árbitro no pitó penalti; la jugada continuó con un contraataque de la ‘Casa Blanca’ que terminó en un golazo de Kylian Mbappé. El VAR convalidó la controversial anotación.
La otra polémica fue porque el árbitro no expulsó a Endrick en la parte final del tiempo reglamentario por juego brusco grave. El brasileño hizo una falta de alta intensidad con los tapones de su guayo en el tobillo de un rival. El juez central no lo expulsó y el VAR no intervino.
Esto fue determinante porque el joven delantero fue quien destrabó el partido en favor del Real Madrid al marcar el gol del 3-2 en el alargue. Después el mismo Endrick puso la quinta anotación.
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