Román Burruchaga cayó con altura y finalizó su majestuoso Roma Open con un logro para el recuerdo | OneFootball

Proveniente desde la qualy, Román Andrés Burruchaga (135º de la ATP) disputó, hasta el momento, el mejor torneo de su vida. En el Roma Open, tercer Masters 1000 de la temporada sobre polvo de ladrillo, consiguió su primera victoria en la categoría al vencer al local Lorenzo Sonego en el debut, pero se topó con Karen Khachanov (24º), en la segunda instancia, y se marchó de la capital italiana con un sabor alegre, más allá de la derrota por 6-4, 5-7 y 6-1.

El hijo de Jorge, campeón del mundo con la selección de fútbol en México 1986 y finalista en el Mundial de Roma 1990, cuya sede del evento se encuentra ubicada a metros del complejo tenístico, no pudo vencer la resistencia del moscovita, siete veces proclamado a nivel ATP, entre ellos en el M1000 de París, y se despidió con la frente en alto luego de dos horas y 39 minutos de acción, poniéndole fin a una semana de ensueño en la que superó la etapa clasificatoria al vencer al colombiano Daniel Galán y el español Pablo Carreño Busta.

El bonaerense de 23 años, actualmente entrenado por Leonardo Mayer, ex jugador y uno de los héroes de la conquista albiceleste en la Copa Davis 2016, peleó con uñas y dientes ante el experimentado europeo, de 28, y lejos de tirar la toalla tras ceder el primer parcial, mostró un mejor semblante en la segunda manga: aferrado y consistente en la línea de base, mostró firmeza con el drive y especialmente con el revés, golpe con el que destiñó cada una de las excursiones a la red de su rival, que lució vulnerable y ofuscado en diferentes tramos del partido.

En el tramo decisivo, sin embargo, la experiencia pudo más. Algo relajado y frío después de la visita al vestuario en el descanso, el último campeón del Challenger 100 de Piracicaba cedería rápidamente el primer turno de servicio y se quedaría con las manos vacías minutos más tarde, no sin antes mostrar entrega, garra y corazón, características innegociables y necesarias para competir en este grado del circuito.

De esta forma, el ruso, ex 8 del ordenamiento masculino, totalizaría 33 tiros ganadores y 47 errores no forzados para celebrar su éxito 79 en competencias M1000, el séptimo en Roma, ciudad alborotada por la reciente elección del nuevo Papa Leon XIV, fanático del tenis, a pocos kilómetros del tour, quedándose con el pasaporte para la tercera ronda, donde se las verá con Francesco Passaro (101º), verdugo de Grigor Dimitrov (15º).

Burruchaga, en tanto, afrontó en el certamen romano su tercer torneo en el máximo nivel del deporte blanco en lo que va del 2025, recordando que había caído en los debuts del Argentina Open y Río de Janeiro durante la gira de polvo de ladrillo de Sudamérica, y se fue de esa tierra con un espectacular segundo registro ATP, tras lo que había sido su única victoria en Córdoba, en febrero del 2024.