
Iniestazo
·26 March 2025
El Barça se desinfla ante el Bayern tras perder a Metu (101 – 102)

Iniestazo
·26 March 2025
Dos ‘finales’ ganadas, tres aún por superar. Tras la ajustada victoria en el Palau ante Casademunt Zaragoza, el Barça afrontaba el choque de trenes ante el Bayern Munich tras cuatro triunfos consecutivos. Los alemanes llegaban con el mismo récord de victorias que los azulgranas, pero con un diferencial en negativo por el cual están obligados a ganar con cierta ventaja para poder escalar entre las posiciones de Playoff.
Un clásico entre Barça y Bayern, por más que no sea de fútbol, no deja de ser un clásico. Tanto es así, que hasta Hansi Flick no quiso perderse este duelo de titanes entre los dos clubes que más han marcado su carrera como entrenador hasta el momento. Espectador de lujo en un Palau que, esta vez, sí presentaba mayoría azulgrana en las gradas, dónde el aliento de los ‘Dracs 1991’ se hizo notar desde el primer momento.
Peñarroya introdujo varios ajustes en el quinteto titular y Punter, Parra y Willy Hernangómez regresaron a la titularidad. Satoransky y Parker, titulares indiscutibles para el técnico egarense, completaron el cinco inicial. Precisamente, Parker y Satoransly protagonizaron una de las primeras grandes jugadas del partido. El alero estadounidense, desde media cancha, asistió con un pase picado al base checo, que machacó el aro sin piedad.
Sin embargo, los azulgranas fueron perdiendo la autoridad con la que comenzaron el partido y el primer cuarto se igualó de inmediato. Parker (9 puntos), Willy (7 puntos) y Punter (6 puntos) fueron los máximos anotadores de un Barça que permitió tres situaciones de ‘dos más uno’ que evidenciaron el desbarajuste defensivo de los azulgranas, de nuevo sin la solidaridad necesaria en las ayudas. Un triple de Shabazz Napier, máximo anotador en el primer cuarto para los bávaros con 8 puntos, decantaba la balanza justo antes del final del primer periodo (28 – 30).
23 puntos con 3 triples, 3 rebotes y 21 de valoración para un Jabari Parker que se reconcilia con su faceta más anotadora | Fuente: @FCBBasket (X)
El Barça no hizo acto de presencia en el comienzo del segundo cuarto y el Bayern, sea cuál sea el deporte, siempre huele la sangre. Un parcial de 2 – 11 liderado por Carsen Edwards (10 puntos) situó a los alemanes a 11 puntos de los azulgranas, que poco pudieron hacer con las tres canastas consecutivas que metió Metu en medio de la sangría bávara.
Parker asomó la cabeza por encima del agua y anotó dos canastas seguidas para transmitir a su compatriota Kevin Punter el síndrome de la ‘anotación compulsiva’. ‘La pantera del Bronx’ encestó dos triples consecutivos para hacer saltar por los aires al Palau. El Barça no desaprovechó el momentum y, tras una gran acción individual de Punter, Joel Parra anotó en la última posesión de la primera parte para certificar la resurrección azulgrana (55 – 56).
20 puntos, 4 asistencias y 20 de PIR para un Kevin Punter que regresó al quinteto titular | Fuente: @FCBBasket (X)
El jarro de agua fría llegó en el tercer tiempo. Tras un igualado inicio en el que dos triples de Carson Edwards mantuvieron al Bayern ligeramente por encima, los azulgranas se reactivaron con un parcial de 9 – 0 para ponerse por delante. Poco le duró la alegría al Barça pues, en una acción totalmente fortuita, Chimezie Metu dijo adiós a la temporada tras romperse el tendón de aquiles de la pierna derecha. Los gritos de dolor entre el desconsolado sollozo del gigante nigeriano enmudecieron a un Palau inmerso en la incertidumbre. Cuando la camilla entró en pista, Metu logró levantarse a un solo pie, pero a duras penas podía sostenerse y, aupado por dos miembros del cuerpo técnico, se retiró en medio de un aplauso unánime por parte de una afición afligida por la incógnita de saber si aquellos fueron los últimos momentos de Metu en el Palau.
Sin duda, una de las imágenes más duras de la temporada. Esperemos que no sea la última vez que vemos a Metu como ‘blaugrana’ en el Palau | Fuente: @FCBBasket (X)
El resto del cuarto fue un tenso pulso entre Jabari Parker y Carsen Edwards por ver quién metía más canastas, en medio de un frenético correcalles favorecido por la pasividad arbitral. Inevitablemente, la lesión de Metu comenzó a desinflar el globo azulgrana, que se agarró al punto de ventaja que tenían sobre los alemanes a falta de diez minutos para el final.
El Barça no solo quería ganar el partido para seguir con vida en Euroliga. También quería dedicarle la victoria a su compañero caído en combate. Buena prueba de ello fueron los primeros dos minutos del último cuarto; un triple de Anderson y dos canastas consecutivas de Brizuela forzaron a los bávaros a parar el partido. Tras el tiempo muerto, los azulgranos no levantaron el pie del acelerador y llegaron a ponerse once puntos por encima de los alemanes gracias a Willy Hernangómez que, con 13 puntos y 14 rebotes, fue el mejor jugador del partido con 24 puntos de valoración.
Willy Hernangómez cuajó una de sus mejores actuaciones de la temporada, probablemente en una de las peores noches para los azulgranas | Fuente: @FCBBasket (X)
Los minutos pasaban y la ventaja azulgerana se estiraba y se encogía como un acordeón, hasta que, de nuevo, Carsen Edwards tomó el control del partido. El base tejano fue una pesadilla constante para la defensa y, con 23 puntos, 5 asistencias y 21 de valoración, se echó el equipo a la espalda para acercarse a tan solo un punto.
El Barça se aferraba a los últimos segundos, pero una falta de Jabari Parker sobre Vladimir Lucic a falta de 17 segundos condenó a los azulgranas. El alero serbio anotó sus dos tiros libres y, pese al gran acierto de Parker de cara a canasta, los mandamientos dictaminaban que Kevin Punter debía jugarse la ultima bola. Sin embargo, la suerte no sonrío al Barça una noche más (101 – 102), en una temporada en la que la moneda siempre le ha mostrado la cruz a los azulgranas entre duras derrotas, fichajes fallidos y, sobre todo, innumerables lesiones de gravedad. Quizás el baloncesto esté siendo demasiado injusto con los azulgranas, y buena prueba de ello es el poco tiempo del que disponen para recomponerse tras una noche tan difícil. Hoy todos los pensamientos están puestos en Metu, pero mañana deberán centrarse del Olimpia Milano. Así de rápido, así de frío, así de real.