El día que 65.000 almas hicieron historia por un taco | OneFootball

El "MaxiTaco": 12 años del día que el Kempes se desbordó de historia

Se cumplen 12 años de una de las jornadas más emblemáticas en la historia reciente de Talleres de Córdoba. Aquel 6 de mayo de 2013, más de 65.000 personas colmaron el Estadio Mario Alberto Kempes para presenciar el partido ante San Jorge, en un hecho sin precedentes que marcó la primera vez que el renovado coliseo cordobés alcanzaba su capacidad máxima.

La historia comenzó en 2011, cuando el antiguo Chateau Carreras (construido originalmente para el Mundial de 1978) fue remodelado y rebautizado como Estadio Mario Alberto Kempes, ampliando su capacidad a 57.000 espectadores. La pregunta que recorría las calles de Córdoba era inevitable: ¿qué equipo sería capaz de llenarlo?

La respuesta llegó aquella tarde-noche de mayo. Con Cacho Sialle como director técnico, Talleres llegaba como único puntero del torneo, pero con Deportivo Maipú pisándole los talones. A pesar de un paro de colectivos que complicaba el traslado, la hinchada albiazul no se dejó intimidar por las adversidades y protagonizó una convocatoria histórica.

El estadio no solo se llenó, sino que superó ampliamente su capacidad oficial. Según los relatos de quienes estuvieron presentes, había aficionados hasta en las escaleras, con pasillos completamente colapsados donde "no entraba ni un alfiler".

El partido, tenso como todo encuentro decisivo, transcurría 0-0 cuando comenzó a circular entre la multitud la noticia de que Santamaría de Tandil estaba derrotando a Maipú, el escolta directo. Solo faltaba el gol de Talleres para sellar el ascenso.

En el inicio del segundo tiempo, a los 5 minutos, llegó el momento que quedaría inmortalizado en la memoria colectiva: Gastón Bottino tomó la pelota, desbordó por un costado y, antes de que se le acabara el espacio, envió un centro al área. Allí apareció Maxi Velasco, quien improvisó un taco que mandó el balón al fondo de la red, desatando la locura de las más de 65.000 almas presentes.

Ese gol, bautizado como el "MaxiTaco", se convirtió en un símbolo que trascendió lo deportivo para transformarse en un hito cultural para la afición de Talleres. La jugada no solo representó el ascenso del equipo, sino que demostró la capacidad de convocatoria de la institución en un contexto adverso.

Doce años después, aquel día sigue representando un punto de inflexión en la historia moderna del club, recordando que incluso en categorías de ascenso, la pasión albiazul fue capaz de lograr lo que muchos consideraban imposible: desbordar el estadio más grande de Córdoba en un lunes con paro de transporte.

Fuente: Club Talleres