Agente Libre Digital
·17 January 2025
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El Espanyol fue mejor en el partido y logró vencer a un Real Valladolid. Los pericos salen del descenso con una gran victoria, que les costó sangre, sudor y lágrimas. Puado adelantaba a los locales en el primer tiempo. Pero, el Real Valladolid lograba empatar el encuentro con un gran gol de falta de Javi Sánchez. Los pericos seguían remando para sumar de 3 y Roberto Fernández ponía el definitivo 2-1. Para el Real Valladolid, la peor de las noticias no fue la derrota, sino la lesión de clavícula de Raúl Moro.
Puado celebra un gol que puede ser muy importante. (Photo by Alex Caparros/Getty Images)
Salía mejor el Espanyol, que quería empezar el encuentro dando un golpe sobre la mesa. Poco a poco, los pericos iban encerrando a un Valladolid que no lograba salir de la presión. El dominio local era claro y Cabrera remataba a la madera un gran centro desde la esquina. El Espanyol bajó el nivel en la presión y el Pucela lo aprovechaba. Un balón filtrado al área le caía plácido a Lucas Rosa, pero providencialmente Joan García desbarataba la ocasión.
El partido era muy parejo y cualquier error podía cambiar el rumbo del partido crucial por la permanencia. Un error de Mario Martín le regalaba el balón a Tejero en la frontal, que sin pensárselo buscaba puerta, pero el disparo se le iba alto. Sin embargo, el gol no llegaría de un error, sino de una genialidad de Puado. Tejero filtró un buen balón que pinchó Puado y tras darse la vuelta solo en el área la mandaba al fondo de la red.
Javi Sánchez empata el partido con un golazo. (Photo by Alex Caparros/Getty Images)
Tras el gol, los locales le dieron el balón a un Real Valladolid falto de ideas. Pese a ello, Marcos André la tuvo para empatar el partido, pero se le marchaba alta. Una gran secuencia de pases de los blanquivioletas lograba llevar el balón a su 9, que no acababa de estar fino de cara a puerta. Apretaban los de Diego Cocca, y en el descuento Moro tuvo su oportunidad. Al crack blanquivioleta le caía un balón muerto en la frontal que obligaba a Joan García a estirarse para evitar el gol del empate.
La segunda parte comenzaba sin un dominador claro, pero el Real Valladolid poco a poco iba creciendo. Moro era el hombre más destacado del Pucela y tuvo sus ocasiones. Las malas noticias para el Real Valladolid llegaban en forma de lesión, pues Raúl Moro era derribado y al caer se lesionaba de la clavícula. Pero, la falta era peligrosa y Javi Sánchez la materializaba, anotando un golazo.
Roberto Fernández, debut con el Espanyol y besar el santo. (Photo by Alex Caparros/Getty Images)
La respuesta perica no se hizo esperar y Alejo Véliz pudo volver a adelantar al Espanyol. El ariete argentino se elevaba y por poco no lograba el empate. El encuentro entraba en una fase de máxima igualdad y ninguno de los dos equipos llegaba con peligro a las áreas. Pero, una falta de acierto para despejar el balón de Juric desde el suelo le dio el balón a los locales que montaron una gran jugada de ataque. El Hilali desbordaba a Lucas Rosa y la ponía directa a la cabeza de un Roberto Fernández, que se zafaba de la marca de Luis Pérez y ponía el 2-1.
El Real Valladolid parecía muy tocado tras el 2-1 y apenas lograba reponerse del gol. Tan solo Amallah con un tiro desde la frontal pudo acercar a los castellanos al empate. Tuvo un último arreón el Pucela, ya en el descuento, con 2 cabezazos, de Marcos André y Kike Pérez. La mejoría del Pucela llegó muy tarde y el 2-1 sería definitivo. Con esta victoria, el Espanyol logra salir de los puestos de descenso, mientras que el Pucela sufre una derrota dura en lo psicológico.
Artículo redactado por Mario Casado