Real Madrid vence al Sevilla y Mbappé roza el 'Pichichi' | OneFootball

Foto: Real Madrid.

Real Madrid cerró su temporada liguera en casa con una victoria sin brillo por 2-0 ante el Sevilla. El protagonista de la jornada fue Kylian Mbappé, autor del primer tanto del encuentro, que lo acerca aún más al Pichichi y a la Bota de Oro. El conjunto andaluz jugó con diez desde el minuto 12 y terminó con nueve.

El partido tuvo escaso ritmo y poca emoción, reflejo de dos equipos sin objetivos por delante. El Madrid, ya sin opciones en ninguna competición, afrontó el duelo entre lesiones, homenajes y rotaciones. En el Sevilla, las protestas contra la directiva marcaron más que el juego en el césped.

La roja temprana a Badé por un agarrón a Mbappé marcó el rumbo del encuentro. Aunque la decisión generó dudas, el VAR confirmó la expulsión tras una larga revisión. A partir de ahí, el Sevilla se encerró para resistir con orden, pero sin armas ofensivas.

Mbappé volvió a ser el más activo del ataque blanco y firmó el gol que rompió la resistencia andaluza. Fue su octavo tanto en cinco partidos, cifras que lo dejan al borde de quedarse con el Pichichi. El francés ha cerrado la campaña con un rendimiento de alto nivel, incluso sin acompañamiento constante.

Modric, titular y lúcido como siempre, fue otro de los pocos que jugaron con intensidad. A sus casi 40 años, sigue siendo el mediocampista más fiable del equipo. Ancelotti también dio minutos a Lunin, Vallejo, Víctor Muñoz y Gonzalo, en un contexto de despedidas y homenajes.

El Sevilla, desdibujado y sin reacción, se quedó con nueve tras la expulsión de Isaac Romero. El atacante fue sancionado por una dura entrada a Tchouameni que inicialmente fue amarilla. El VAR volvió a intervenir y obligó al árbitro a rectificar.

Con un rival mutilado, el Madrid terminó imponiéndose más por inercia que por fútbol. Bellingham selló el 2-0 con una buena definición en los minutos finales. Endrick salió lesionado y se convirtió en el undécimo jugador blanco en la enfermería.

El encuentro deja poco para el análisis deportivo, pero mucho en lo simbólico. Mbappé mantiene vivo su pulso por el Pichichi, mientras el Sevilla cierra un año marcado por el caos institucional. La afición, ausente en la primera parte, expresó su descontento más allá del resultado.