Un Real Madrid al límite | OneFootball

Los de Ancelotti han ganado los últimos tres encuentros de Liga por la mínima

Al borde del precipicio, pero con final feliz. Halagüeño. Así está viviendo el Real Madrid los encuentros del torneo doméstico desde hace varias semanas. Frente a Rayo Vallecano (2-1), Villarreal (1-2) y Leganés (3-2), el equipo blanco culminó con los tres puntos en el saco, en cambio, en todos ellos, suscitaron más dudas de certezas en el ambiente.

Aún así, ese compendio de victorias ha catapultado a los de Chamartín. Vuelven a pisar los talones de un FC Barcelona que, de momento, apenas marra en LaLiga EA Sports en lo que va de 2025. Algún día, caerá la fortaleza de Flick, tal y como le ocurre a la inmensa mayoría de los clubes del primer escalafón del fútbol español.

En la visita del CD Leganés al Santiago Bernabéu, el Madrid acarició la hecatombe. La sangre se quedó cerca de llegar al rio. Para evitarlo, Mbappé y Bellingham se encargaron de hacer las delicias de una afición madridista que fue impacientándose paulatinamente. De hecho, aquello de marcharse al tiempo de asueto con una derrota provisional, generó suspicacias.

El Real Madrid mata al matagigantes

Si en el primer periodo Kylian Mbappé había firmado un penalti a lo Panenka ‘cum laude’, a Bellingham le bastaron un par de minutos tras el descanso para devolver las tablas al marcador. Anotó un tanto poco ortodoxo, aunque, fruto de no abdicar en ningún momento de la jugada, pudo convertir dentro del área. Más tarde, para abrochar el triunfo, el atacante francés mató al matagigantes mediante un lanzamiento de falta ejecutado a la perfección. Matrícula de honor.

En cualquier caso, el equipo merengue sufrió hasta el final. Otra vez, al límite. Otra vez… con un resultado apretado. El Leganés, que aunó fuerzas, acarició el empate durante el desenlace del encuentro, sin embargo, se dio de bruces con un Real Madrid que se mantiene segundo en la tabla liguera.

Después del compromiso contra los pepineros, Carlo Ancelotti afirmó en rueda de prensa que «ha faltado equilibrio y por eso hemos encajado los dos goles que no merecíamos por lo que hicimos en la primera parte. Se podría gestionar mejor la ventaja y hemos sufrido demasiado. Después del parón suele pasar, pero nos ha costado coger ritmo». Trámite superado. Ahora, el Real Madrid centra el foco en las semifinales de Copa del Rey ante la Real Sociedad (martes, 21.30 horas, Santiago Bernabéu).