A una final, bajo mínimos | OneFootball

El Madrid afronta el primer episodio de una eliminatoria dramática ante el City con solo dos de sus siete defensas sanos. Guardiola recupera efectivos. Valverde será lateral.

Uno de los dos clubes más valiosos del mundo y uno de los dos últimos campeones de la Champions se verá fuera de Europa sin pisar siquiera los octavos de final para demostrar que es perfectamente posible jugar entre regular y rematadamente mal con los mejores jugadores del mundo. Un partido destinado a la final de mayo ha quedado convertido en una eliminatoria dramática en febrero, la quinta en cinco años, con City y Madrid venidos a menos. Cuando se encontraron el año pasado, los de Mánchester estaban a un punto del líder Arsenal en la Premier y habían conquistado dos títulos, mientras el Madrid aventajaba al Barça, al que había goleado en la Supercopa, en ocho puntos. Presuntamente reforzados, los de Guardiola se mueven ahora a quince puntos del Liverpool y han caído en la EFL Cup, mientras el Madrid ha perdido gran parte de su ventaja en la Liga al haber sumado solo un punto en los dos últimos encuentros y se vio goleado por el Barça en la Supercopa europea hace apenas un mes.

El curso pasado, el Madrid se proclamó campeón de la Champions sin perder un partido y el City se fue en cuartos también invicto, después de dos empates con los de Ancelotti. Una tanda de penaltis les eliminó. Los blancos, esta temporada, han perdido ante Lille, Milan y Liverpool y no han sido capaces de ganar a ningún grande en la Liga. El City, en una liguilla lamentable, hubo de esperar al último partido para meterse vigesimosegundo, solo un punto por encima del corte, tras perder con Sporting, Juventus y PSG y empatar con el Inter. Solo pudo con los eliminados Sparta y Slovan y con el Brujas. De los principales de la Premier únicamente le ha ganado al Chelsea.

El partido le llega al Madrid en su peor momento de la temporada. En verano, pese a la marcha de Nacho, decidió no fichar un quinto central, cuarto en la práctica por el papel fantasma de Vallejo. Ahora, con las bajas de Lucas Vázquez, Rüdiger y Alaba y después de haber renunciado al mercado de invierno pese a las graves lesiones de Carvajal y Militao, el equipo tiene aptos únicamente a dos laterales izquierdos. Así que tendrá que jugar en el Etihad, donde nunca ganó, con un centrocampista, Valverde, como lateral derecho (tres victorias en ocho partidos cuando actuó ahí), y otro, el criticado Tchouameni, como central junto a un canterano que no existía cuando comenzó el curso (Asencio). Mendy será el lateral izquierdo y solo quedará la duda de quién formará el doble pivote con Camavinga, Ceballos o Modric, por detrás de los cuatro magníficos. Incluso el banquillo será raquítico.

Una racha negra

El City tiene menos bajas, pero más problemas. Todo empezó a torcerse con la lesión de Rodri ante el Arsenal. Solo había disputado tres partidos y Guardiola se quedó sin la pieza maestra del equipo, elegido poco después Balón de Oro. Nadie ha estado a su altura. Ni Kovacevic, el más utilizado, ni Gündogan, repescado este verano, ni Bernardo Silva. Así, entre finales de octubre y finales de noviembre, encadenó una racha negativa insólita: una sola victoria en trece partidos. El equipo, defensivamente, se deshizo. En toda la temporada anterior encajó 34 goles en la Premier; en esta, cuando aún faltan catorce jornadas, le han hecho 35. En el ataque hay poco que achacarle a Haaland, que lleva ya 25 tantos, pero ni Foden ni De Bruyne han estado a su mejor nivel. Especialmente el belga, gran pasador del equipo, que suma solo seis asistencias cuando su media desde que llegó al City en 2016 es de 18 por curso.

La salida de Walker al Milan ha dejado al equipo muy desabrigado en el lateral derecho. Ahí pone Guardiola a un mediocentro, Matheus Nunes, que hasta 2025 nunca había jugado de lateral. Las lesiones han acabado por agravar el desastre, aunque para el partido ante el Madrid recupera, cogidos con alfileres, a Ederson, Aké, Rúben Dias y Doku.

Para enderezar el rumbo, los propietarios emiratíes han gastado tan escandalosamente como suelen: 225 millones en cinco jugadores. Uno de ellos, Juma, ha acabado cedido en Lens. Dos, Vitor Reis y Khusanov, centrales de 19 y 20 años, respectivamente, son opciones de futuro. El primero ni siquiera está inscrito en la Champions. Pero también ha incorporado a dos futbolistas cuajados, Nico González, que se lesionó el sábado en su debut, ante Leyton Orient, y el egipcio Omar Marmoush, un goleador. Marmoush se crio en la cantera del Wolfsburgo, pasó por cesiones a St. Pauli y Stuttgart y en 2023 decidió no renovar para marcharse al Eintracht. Allí fue imparable. 37 goles en 41 partidos en su primer año, 24 en 16 en este, argumentos suficientes para que el City pagará 70 millones por él. Ya ha marcado dos goles con los ‘skyblues’ y puede ser un gran compañero de Haaland.

Un estadio maldito

El City llegará más descansado que el Madrid, porque por la debilidad del Leyton Orient Guardiola se permitió dejar fuera de la lista a Gvardiol, Kovacic y Haaland y en el banquillo a Stones, Akanji, Nunes, Bernardo Silva, De Bruyne y Foden. Ahí están ya gran parte de los titulares en el partido de hoy.

El Madrid nunca ha ganado al City en sus seis partidos como visitante. Empató en sus dos primeras visitas, ante equipos dirigidos por Mancini y Pellegrini, y sufrió mucho con los de Guardiola. Perdió los tres primeros y empató milagrosamente en el último, que le clasificó para las semifinales de la temporada pasada, después de recibir 33 tiros en 120 minutos. En esos cuatro choques a domicilio encajó once goles y hubo de soportar 21 disparos de promedio. Así que, a pesar de la mala racha del City, al Madrid le espera un partido incómodo, sin la pelota, pese a que en la Premier los datos dicen que la posesión de los de Guardiola ha caído en cinco puntos, tira menos y le tiran más. En Europa, en cambio, nadie acapara más el balón ni tiene más acierto en el pase ni lanza más ataques. El plan del Madrid es llevar la eliminatoria muy viva al Bernabéu, sede oficial de los imposibles.

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