Offsider
·28 de octubre de 2024
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·28 de octubre de 2024
Carlos Alcaraz afronta el último tramo del año con ilusión y ganas de mejorar su rendimiento en pistas indoor. El Masters 1000 de París, las ATP Finals y la Final 8 de la Copa Davis, son los próximos torneos del murciano.
Carlos Alcaraz ha regresado a París. La última vez que pisó la icónica ciudad francesa, fue para colgarse una plata olímpica al cuello. Ahora, casi entrados en el mes de noviembre, la situación es distinta. Carlitos, que disputará el Masters 1000 de París Bercy, aterrizó ayer en la capital gala, y sin tiempo que perder, acudió al Palais Omnisports para preparar de la mejor forma posible su estreno en el torneo. Presumiblemente, debutará el martes ante el vencedor del Jarry vs Sonego.
Carlitos enfoca el último tramo del curso tenístico con la ambición intacta. De aquí a que acabe el año, solo competirá en pistas rápidas indoor. Una superficie, que le ha sido esquiva hasta la fecha. A sus 21 años y con mucho camino por recorrer, Charli ha disputado un total de 31 partidos en pistas indoor, ganando 22 y perdiendo 9. El único título que atesora en este tipo de canchas, llegó en 2021, cuando brilló con luz propia en las Next Gen Finals. A partir de ese preciso instante, luces y sombras.
A pesar de no encontrarse del todo cómodo, aún, sobre pistas indoor, Alcaraz ya sabe lo que es llegar a fases avanzadas en torneos disputados bajo estas condiciones. Las semifinales en las ATP Finals (2023), Viena (2021) y Basilea (2022), son el mejor ejemplo. Hay margen de mejora, sí, pero nada que no se pueda subsanar conforme vaya cogiendo experiencia.
En París Bercy, más de lo mismo, alegrías y jarros de agua fría. Hace tres años, el tetracampeón de Grand Slam derribó el muro de Sinner (primer partido entre ambos) para después colapsar ante el francés Hugo Gaston. El asunto no mejoró en 2022, habiendo ganado el US Open, Alcaraz tuvo que retirarse en su duelo de cuartos de final que lo midió a Holger Rune. Más sorprendente fue la derrota en 2R frente a Safiullin en 2023. ¿Habrá redención?
El tenis sobre pistas techadas es totalmente opuesto a lo que podemos ver en eventos outdoor. Bajo techo, el servicio se presenta como una herramienta fundamental para conseguir triunfos. Sin ir más lejos, esta semana pasada, hemos visto cómo grandes sacadores de la categoría de Mpetshi Perricard o Jack Draper, han conseguido imponer su ley en Basilea y Viena respectivamente. Sin la influencia de los distintos agentes meteorológicos, el embrujo de las pistas indoor no es fácil de resolver.
Carlos Alcaraz durante un partido en París Bercy. Fuente: Eurosport.
No vamos a descubrir la pólvora, pero Alcaraz posee los recursos suficientes como para incrementar su rendimiento en indoor. Simplemente, hay que pulir esos recursos. Carlos saca bien, su derecha es un martillo, su revés un seguro y puede acortar los puntos acudiendo a la red. No hay razones que inviten al negativismo. El aprendizaje y el tiempo, harán el resto. Tarde o temprano.
La mini gira europea en pistas cubiertas supone un desafío para el maltrecho físico de muchos tenistas. El agotamiento es palpable a finales del año. La estrechez del calendario, la carga de partidos y el desgaste, hace que los depósitos de gasolina lleguen bajo mínimos. Ese es un factor a tener en cuenta y que el propio Alcaraz ya ha sufrido en sus carnes (se retiró en Bercy 2022 y no pudo competir en el torneo de Maestros) en como ya hemos mencionado.
En lo que llevamos de 2024, Alcaraz ha competido hasta en 61 partidos, con un bagaje de 51 victorias y 10 derrotas. En el próximo mes, a parte del Masters 1000 de París, comparecerá en Turín (ATP Finals) y las finales de la Copa Davis (Málaga). ¿Saldrá ileso del envite? Cruzamos los dedos.