FCBN
·5 de julio de 2024
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Durante el partido de octavos de final Inglaterra-Eslovaquia, Jude Bellingham encendió la polémica por un gesto. El jugador del Real Madrid puso sus manos en sus genitales de forma obscena hacia el banquillo de suplentes del conjunto eslovaco, en lo que pareció un gesto de provocación. Previamente el centrocampista había anotado un gol de chilena que llevó al alargue el encuentro.
Ante las preguntas de los medios después del partido, el inglés intentó restarle importancia al asunto: "Fue una broma interna hacia algunos amigos" respondió. "Nada más que respeto por cómo jugó Eslovaquia esta noche" soltó el mediocampista del conjunto merengue. A pesar del incidente, la Federación de Eslovaquia no interpuso ninguna denuncia, aunque criticaron el comportamiento de su rival en el césped.
La actitud del exjugador del Birmingham City provocó que las autoridades europeas de fútbol acordaran una multa de 30.000 euros y una amenaza de sanción si reincide de aquí a un año. Mediante un comunicado, el Comité de Disciplina se pronunció: "Se decide multar con 30.000 euros al jugador de la Asociación Inglesa de Fútbol Jude Bellingham y suspenderlo por un partido de competición UEFA al que de otro modo tendría derecho por violar las reglas básicas de conducta".
También en el comunicado explicaron cómo se haría efectiva la decisión de la UEFA contra Bellingham: "Dicha suspensión no se ejecutará de inmediato y estará sujeta a un período de prueba de (1) un año a partir de la fecha de la presente decisión", finalizó el texto. Por lo tanto, el futbolista podrá jugar los cuartos de final contra Suiza el sábado tras ser advertido por la máxima entidad del balompié europeo.
Al contrario que con Bellingham, la UEFA sí acordó suspender a Merih Demiral con dos encuentros por sus gestos durante la celebración del gol ante Australia en el partido de octavos de final. Ahora, el turco se perderá el duelo de cuartos de final ante Países Bajos y la hipotética semifinal. El Comité de Disciplina ha sancionado al defensor después que hiciera un gesto con ambas que asemejaba a la cabeza de un lobo, un símbolo relacionado con el movimiento ‘Ulkucu’, mejor conocido como ‘Los Lobos Grises’.
La organización turca por la que fue sancionado el defensa ha sido clasificada como islamista, neofascista, terrorista y ultranacionalista. Incluso, la Oficina Federal para la Protección de la Constitución ha denunciado que ‘Los Lobos Grises’ tienen con más 12.000 miembros en Alemania. Cabe destacar que el grupo nació como una rama del Partido del Movimiento de la Ultraderecha.
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