Agricultura
·16 de octubre de 2023
Agricultura
·16 de octubre de 2023
Publicado en
por
Bélgica-Suecia
Comparte
El ambiente en el mundo está tenso y el fútbol sufre sus consecuencias. Es que durante esta jornada, los seleccionados de Bélgica y Suecia se negaron a jugar el segundo tiempo del partido (1-1) por un ataque yihadista en las cercanías del estadio en Bruselas, que dio muerte a dos personas y dejó herida a una tercera.
De acuerdo a las informaciones emanadas desde Europa el ataque sucedió alrededor de las 19:30 horas de Bélgica, donde un hombre disparó con un arma de guerra en el centro de la ciudad de Bruselas, dando muerte a dos personas de nacionalidad sueca y dejando herida a otra.
Alexander De Croo, primer ministro belga, confirmó a través de su cuenta de X que se trató de un «atentado», además de informar sobre la nacionalidad de las víctimas, quienes según informa ‘HLN‘ seguían al club escandinavo.
Ante este terrible hecho, los futbolistas suecos decidieron en el descanso no salir a jugar los segundos 45 minutos, por lo que el duelo fue suspendido.
El periódico deportivo DH compartió un video de un testigo, donde se puede apreciar al victimario llegar en una moto al lugar. Luego la bota al piso y comienza a disparar con un arma de gran calibre.
Ahí, el sujeto, que vestía una chaqueta naranja fluorescente y un casco blanco, disparó el arma contra las dos personas fallecidas, quienes se encontraban en un taxi con la camiseta de la Selección sueca.
Luego comenzó a perseguir a otras personas que intentaron refugiarse en un edificio del Fondo Flamenco de Vivienda. A ellas también les disparó e incluso, a una de ellas que yacía en el suelo volvió a dispararles, para a continuación darse a la fuga.
De acuerdo a los detalles entregados por algunos medios y testigos, la chaqueta naranja que utilizaba pertenecía al personal municipal de limpieza de Bruselas. Además, sostienen que el sujeto gritó «Allá akbar» mientras disparaba a sus víctimas.
Tras el hecho, el victimario publicó un video en sus redes sociales, donde afirmó pertenecer al Estado Islámico y presumió haber ejecutado a «infieles». Además, agregó que le disparó a dos personas para «vengar a los musulmanes y que vivimos y morimos por nuestra religión».
En tanto, los servicios de emergencia y policiales están movilizados para tratar de localizar al agresor. El primer ministro, Alexander De Croo, y los responsables de la cartera de Interior y de Justicia acudieron esta noche al Centro Nacional de Crisis para seguir la situación.