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Carlos Muñoz del Real·30 de octubre de 2018
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Carlos Muñoz del Real·30 de octubre de 2018
Lo que parecía un partido plácido en la segunda ronda de la DFB-Pokal para el Bayern Múnich se terminó por complicar por la cercanía final del resultado.
Empezó bien el equipo de Kovac, que formaba con jugadores titulares (Neuer, Müller, Ribery…). Fue Sandro Wagner a los 8 minutos quién empujó a placer un pase de Renato Sanches para hacer el 0-1 ante el modesto Rödinghausen.
Sólo 4 minutos después y con gol de Müller de penalti, los bávaros cogían distancia y parecía por tanto que se avecinaba una goleada tranquila. De nuevo desde los once metros a los 22 minutos, Renato Sanches pudo hacer el tercero, pero su tiro dio en el larguero.
Después del descanso llegó la gran sorpresa. Minuto 49 y Linus Meyer remataba a gol un centro desde la parte derecha para recortar diferencias y hacer creer a la afición que llenaba las gradas del estadio.
Este equipo de la cuarta división y que participaba por primera vez en la Copa Alemana estaba manteniendo las opciones de poder empatar al gran gigante alemán.
Pese a que el Bayern venció y avanzó de ronda, la sensación de terminar pidiendo casi la hora no es el mejor síntoma para afrontar los próximos retos que le esperan al equipo de Kovac en Bundesliga, donde amenaza el liderato del Borussia Dortmund.