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Manuel Domínguez·13 de mayo de 2019
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Manuel Domínguez·13 de mayo de 2019
Tras más de un lustro sin hacerlo, el Celta deberá mirar a la portería durante el próximo mercado de fichajes. El club de Vigo ha decidido apostar por sus guardametas locales (Yoel, Sergio y Rubén Blanco) durante las últimas temporadas. Sin embargo, el tiempo ha dejado claro que la inseguridad bajo los tres palos penaliza, y mucho, al club celeste temporada tras temporada.
En el último año se produjo un cambio que era reclamado por gran parte de la afición gallega. Rubén Blanco pedía a gritos una oportunidad a costa de un Sergio Álvarez que llevaba alternando luces y sombras semana a semana en las porterías de Balaídos. Con Rubén como primer portero, la inseguridad ha permanecido en cada balón colgado y el club y afición demandan inversiones en el próximo verano.
Porteros como Roberto Jiménez, Joel Robles o Adán deberían de ser tanteados por una directiva que no ha hecho los deberes en la última temporada.