POSTA DEPORTES
·2 de diciembre de 2024
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San Luis Potosí, México.- El Torneo Clausura 2006 quedó grabado en la memoria de los aficionados del fútbol mexicano, especialmente para los seguidores del Atlético San Luis, quienes vieron a su equipo alcanzar la primera final de su historia. Sin embargo, el sueño de alzar el título se desmoronó ante un Pachuca que vivía un momento estelar y supo imponerse en una serie llena de emoción y drama.
¿Cómo pasó San Luis de ascendido a finalista?
El Atlético San Luis había ascendido a la Primera División en el Clausura 2005, pero pocos imaginaban que apenas un año después estaría peleando por el campeonato. Liderados por Raúl Arias, los potosinos se consolidaron como un equipo sólido y pragmático, con una defensa férrea y un ataque efectivo. Durante la liguilla, eliminaron a rivales históricos como América y Tigres, ganándose el respeto y admiración de propios y extraños.
En el otro extremo estaba Pachuca, dirigido por Enrique “Ojitos” Meza, un equipo que comenzaba a escribir su legado como uno de los clubes más exitosos de México. Con figuras como Gabriel Caballero, Damián Álvarez y Aquivaldo Mosquera, los Tuzos llegaban a la final como favoritos tras una temporada regular dominante.
¿Cómo fue la final del Clausura 2006?
El partido de ida se disputó en el Estadio Alfonso Lastras, donde San Luis se mostró valiente y logró mantener el empate 0-0, dejando la definición para la vuelta en el Estadio Hidalgo. En la vuelta, Pachuca impuso su jerarquía con un gol de Luis Ángel Landín, suficiente para derrotar 1-0 a los potosinos y consagrarse campeón.
La solidez defensiva de San Luis no fue suficiente para frenar a un Pachuca que, con un solo gol, demostró por qué era el equipo a vencer en aquel torneo.
Aunque San Luis no logró el título, su camino en el Clausura 2006 quedó marcado como un ejemplo de superación y resiliencia. Fue la primera vez que un equipo recién ascendido llegaba tan lejos en tan poco tiempo, un logro que los aficionados potosinos recuerdan con orgullo.
Por su parte, Pachuca comenzó en ese torneo una época de gloria que lo consolidó como uno de los clubes más exitosos de la década, conquistando títulos nacionales e internacionales.