Vermouth Deportivo
·3 de enero de 2023
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·3 de enero de 2023
Otro revés recibió el conjunto Celeste que parecía avanzar a octavos de final del este certamen español pero quedó con las manos vacías en su visita a Catalunya. Los Periquitos, después del gran debi que le jugaron al Barcelona, ganaron por 3 a 1 en tiempo suplementario para meterse en octavos de final de la Copa del Rey.
Una doble desatención del fondo complicaba las aspiraciones del Espanyol. Iba un cuarto de hora del capítulo inicial cuando Luca de la Torre mandó un centro desde la izquierda y Joan García no pudo despejar con creces. De ahí nació otra chance que Celta no falló porque Óscar Rodríguez sacudió y Gonçalo Paciência empujó en el área chica.
El asunto estaba trabado, se hacía bravo y casi de ida y vuelta. Los catalanes no se daban por vencidos y sabían que frente suyo tenían posiblemente el peor rival de 16avos de final que podía tocarle. No obstante, en el arranque de la complementaria, Javi Puado empató las cosas con un cabezazo a espalda de todos tras un córner corto desde la izquierda.
La situación para la visita se complicó de manera irremontable en el tiempo extra. En parte por el gol de Sergi Darder que adelantaba a los Periquitos sino por las protestas de Agustín Marchesín que derivaron la expulsión del guardameta argentino. Los Celestes tuvieron que jugar con diez hombres, y con Hugo Mallo como arquero.
El defensor poco pudo hacer con un nuevo oficio y por eso mismo el que aprovechó fue el dueño de casa que en los últimos suspiros sellaron el triunfo con un tanto de Nicolás Melamed valiéndose de todo tipo de ventajas en una contienda que ya sabía a desvirtuada.
Celta ganaba con gol de Paciência pero Espanyol no se desesperó. De hecho, tuvo la tranquilidad para dar vuelta el asunto e imponerse por 2 a 1 para clasificar a octavos de final de la Copa del Rey. En esa instancia, su rival será Sporting de Gijón o Rayo Vallecano.
Foto: @RCCelta