Grada3.COM
·13 de marzo de 2025
Ferrari, en el punto de mira de la FIA por su ala trasera

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·13 de marzo de 2025
La Fórmula 1 se encuentra en una etapa de cambio normativo y la FIA ya ha puesto en marcha nuevos cambios en el reglamento para tapar las lagunas y mejorar la seguridad; la modificación del protocolo para la bandera negra con disco naranja es uno de los puntos más importantes de esta modificación del reglamento, y se le permite al director de la carrera la detención inmediata de una monoplaza en circunstancias peligrosas y sin que haya mediaciones.
También, se han realizado modificaciones en el reglamento en cuanto a las salidas desde el pitlane. Hasta ahora, los pilotos que salían desde boxes eludían la vuelta de formación y esperaban a que llegase el momento propicio para incorporarse a la carrera. Tal estrategia se traducía para los pilotos en ventajas estratégicas, como elegir neumáticos tarde cuando el estado de la pista cambiara. No obstante, con el nuevo reglamento, la FIA busca igualar el procedimiento y evitar disparidades entre equipos.
El debate sobre Ferrari ha ganado relevancia en el paddock, después de que Red Bull haya insinuado algún tipo de sospecha respecto a la legalidad del ala trasera del SF-25. La escuadra austriaca señala que la forma de la estructura del ala permite una flexión a medida que la velocidad máxima se aproxima, y de este modo, una reducción de la resistencia al aire con la consiguiente ventaja aerodinámica.
Como han explicado en el paddock, Red Bull ha presentado una queja a la FIA haciéndoles saber que la matriz del material de carbono que usan en el SF-25 presenta un comportamiento flexible que se adapta, como si de la flexibilidad de un ala de un avión se tratase, a la velocidad del monoplaza. Esa flexibilidad, aunque pasa los controles estáticos que hace la FIA, podría permitir a Ferrari obtener una ganancia aerodinámica que no debería de estar usando.
McLaren también también está en el punto de mira por utilizar mecanismo similares, por lo que la FIA ya ha decidido tomar medidas y anticipa inspecciones más profundas previas al arranque oficial de la temporada en Australia. Ferrari, aun así, continua resistiéndose y fiándose de que sus resoluciones están en conformidad con lo que reza el reglamento.
Tras la insistencia de la escudería Red Bull y otras voces que existen dentro del paddock, la FIA ha dado un paso más y ha decidido organizar una verificación de acuerdo a una serie de observaciones que se realizarán en las fábricas de Maranello y Woking antes del comienzo de la temporada. Los comisarios técnicos a los que se les ha encomendado hacer unas pruebas a fondo de la composición del ala trasera de Ferrari y la de McLaren calcularán si su comportamiento durante la pista es de acuerdo a los patrones de las especificaciones actuales.
Las verificaciones técnicas en pista serán igualmente intensificadas en el Gran Premio de Australia, donde los delegados de la FIA llevarán a cabo pruebas más severas que las realizadas hasta el momento para conseguir detectar posibles irregularidades en la flexibilidad de los elementos aerodinámicos. En caso de hallar indicios de que Ferrari ha sacado partido de una zona gris del reglamento podrían imponer restricciones adicionales o bien exigirles de inmediato la modificación de su monoplaza.
De momento Ferrari se mantiene firme en su opinión asumida de que el diseño de su SF-25 es 100% legal. Pero, a medida que se intensifica la presión de la escudería Red Bull con la vigilancia incesante de la FIA, ha llegado la lucha técnica de la Fórmula 1.