Vermouth Deportivo
·15 de octubre de 2023
Vermouth Deportivo
·15 de octubre de 2023
Los Magiares Mágicos tomaron la delantera del grupo G y, de no mediar imponderables, el martes podría estar confirmando su participación en la próxima edición de la Eurocopa. En Budapest, los de Marco Rossi derrotaron por 2 a 1 a las poderosas Águilas Blancas.
Era una final o, prácticamente, algo parecido. Ambos llegaban a este partido igualados en puntos pero Serbia tenía cierta obligación por tener un partido más que el resto en la zona. Sin embargo, Hungría se hizo fuerte en casa y se quedó con tres unidades vitales de cara al objetivo.
El juego fue atrapante, de ida y vuelta, y los locales abrieron la cuenta. A los 20 minutos del período inicial, Ronald Sallai metió un pase profundo para Loïc Nego. El francés nacionalizado húngaro avanzó sin marcas, descargó hacia el medio, y Barnabas Varga con un zapatazo no perdonó a Vanja Milinkovic-Savic.
Serbia llegó al empate un rato después de la media hora. Un córner bien venenoso de Andrija Zivkovic encontró el cabezazo de Strahinja Pavlovic que no le permitió siquiera reaccionar a Denes Dibusz. Sin embargo, Hungría respondió rápidamente.
Un misíl, una maravilla, una obra de arte le permitió a los de Rossi quedarse con los tres puntos. Nego avanzó por derecha, tocó hacia el medio como para fotocopiar el tanto inicial, y un zurdazo de Sallai que se colgó del ángulo superior derecho a la visita.
Si el primer tiempo fue un partidazo, la complementaria fue apoteósica pero sin más goles. Le anularon uno en el arranque a Aleksandar Mitrovic por offside. En el área opuesta, el travesaño le negó el tercero al dueño de casa en un lindo cabezazo bombeado de Varga.
A veinte para el cierre, las Águilas Blancas contaron con una jugada inmejorable para empatarlo pero, en la misma acción, el palo izquierdo de Dibusz rechazó los tiros de Dusan Tadic y, a posteriori, el de Mitrovic. Y si bien hubo mucho más, los Magiares Mágicos también dilapidaron ocasiones con espacios en ofensiva.
Fue un verdadero partidazo donde quien quedó masticando bronca ha sido Serbia que no mereció perder aunque su rival haya hecho méritos para ganar. Hungría, con un plantel sumamente exquisito, ganó 2 a 1 en Budapest y quedó a un paso de sacar boleto rumbo a la próxima Eurocopa.
Foto: Photo by ATTILA KISBENEDEK/AFP via Getty Images