Jeremy Monga, un rayo de optimismo para un Leicester casi descendido | OneFootball

Jeremy Monga se ha convertido en el segundo debutante más joven en disputar un partido de la Premier League. Con 15 años y 271 días, jugó poco más de 15 minutos en la derrota del Leicester 0-3 ante el Newcastle

Un debut histórico

La vuelta del Leicester City a la Premier League no ha sido como esperaban los «foxes». Entre la salida de Maresca para entrenar al Chelsea, las imágenes de jugadores del propio club desprestigiando a Steve Cooper, una situación financiera preocupante y un nivel muy bajo por parte de la plantilla, los aficionados han tenido pocas razones para disfrutar de su equipo.

Por eso es curioso que una derrota 0-3 ante el Newcastle de Eddie Howe, la noticia no tenga que ver ni con la buena racha de los «magpies» ni del casi descenso del Leicester. Jeremy Monga (10/07/2009) una de las grandes joyas del fútbol inglés, debutaba con el primer equipo con solo 15 años. Desde hace ya un tiempo está siendo seguido muy de cerca por entidades como la del Real Madrid o la del Manchester City, y entrena frecuentemente con los de Van Nistelrooy. Y si no se encuentra más dentro de la dinámica de «los mayores» es porque muchas de las veces tiene que asistir al colegio.

Los ’16 minutos que disputó el lunes lo sitúan como el segundo futbolista más joven en jugar en la Premier League. El primero es la joven promesa del Arsenal, Ethan Nwaneri, que debutó en 2022 con 15 años y 181 días. Obviamente el récord de precocidad o anécdotas tan fáciles de viralizar como que tuvo que cambiarse en un vestuario aparte o que en su camiseta no podía estar el patrocinio de la casa de apuestas que financia al Leicester, no debe desvirtuar la situación del club ni crear expectativas imposibles para un adolescente con potencial.

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Una crisis en todas las disciplinas

Desde hace ya unos meses, el equipo no encuentra el rumbo y parece que existe una desconexión con los aficionados. Cuando en verano Maresca abandonó la disciplina del Leicester para recalcar en el Chelsea, algo se torció en el ambiente (aunque es cierto que la irregular recta final en Championship ya generaba algún signo de preocupación). Steve Cooper, ex técnico del Nottingham Forest, rival del Leicester, no conectó con la entidad y el juego no entusiasmaba ni a algunos jugadores ni a los fans.

Rudd Van Nistelrooy era una apuesta muy arriesgada por su casi nula experiencia como entrenador, pero cuyo legado como jugador podía levantar un vestuario en una situación extraña, sin embargo, nada mejoró. Al Leicester le falta de talento en casi todas las líneas del campo y muy pocos futbolistas han estado a un nivel necesario para mantener la categoría. Mads Hermansen o Facundo Buonanotte no han sido suficientes para pelear el descenso y se encuentran a 15 puntos de los Wolves (que son los que marcan la salvación) con solamente 7 partidos restantes.

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Récords negativos y el abismo de Championship

El récord de Van Nistelrooy pasa por ganar solamente 2 partidos con el Leicester a pasar 8 encuentros como local sin puntuar ni marcar. Y con la derrota contra el Newcastle ya los aficionados tienen claro que el año que viene volverán a ver a su equipo en Championship. La aparición de Monga al menos daba algo de optimismo a los seguidores que decidieron no abandonar el estadio después del primer tiempo.

El Leicester vuelve a buscar ese «borrón y cuenta nueva» que ya realizaron hace un par de temporadas. Sin embargo, la crisis económica del club pone en un aprieto a un club que se había vuelto habitual en la división de oro inglesa. La cosa es que todo dolerá menos si jóvenes como Monga confían en que no es mala idea quedarse en la ciudad de Leicester para desarrollarse como futbolistas de élite.