Versus
·17 de abril de 2024
Versus
·17 de abril de 2024
Quince años después de retirarse, el legendario atacante brasileño Romário está de vuelta: el America de Rio de Janeiro, club que preside, lo fichó para intentar escalar de división en el Campeonato Carioca.
"No voy a competir en el campeonato, pero sí jugar algunos partidos con mi equipo del corazón y cumplir un sueño más: jugar al lado de mi hijo", escribió en su cuenta de Instagram.
El 'Baixinho', de 58 años, considerado uno de los mejores delanteros de la historia, defenderá los colores del equipo que preside desde enero y en el que jugó fugazmente en 2009.
El campeón del mundo con Brasil en 1994 fue inscrito para disputar la segunda división del torneo estatal de Rio de Janeiro (Campeonato Carioca Serie A2), que arranca en mayo y finaliza en agosto.
El vencedor del certamen jugará a principio de 2025 la primera división carioca, donde compiten equipos de Rio que participan en la élite brasileña, como Flamengo, Fluminense, Vasco da Gama y Botafogo.
Romário fue elegido presidente del America en noviembre por un mandato de tres años. Compagina ese cargo con el de senador federal por Rio, para el que fue electo en 2015 y reelegido en 2022.
En 2009, cuando era gerente de fútbol del equipo, interrumpió brevemente su retiro, anunciado un año antes, para actuar por el once adorado de su papá Edevair, fallecido en 2008.
Jugó cerca de 30 minutos en el partido que les dio el título de la cuarta división carioca.
Su padre, ferviente hincha del 'Mecão', soñaba con verlo defender el club, algo que no sucedió en los mejores momentos de la exitosa carrera del "Chapulín".
En el America, Romário compartirá con su hijo, el atacante Romarinho, contratado en marzo, y el delantero André Felipe, excompañero de Neymar en el Santos y con pasajes en el Dinamo de Kiev, el Bordeaux de Francia y el Sporting de Lisboa, entre otros.
Fundado en 1904 y vencedor de siete Campeonatos Cariocas de primera división, America atraviesa una dura crisis económica.
Como presidente, Romário tiene el mandato de sanear las finanzas y lograr que el equipo dispute una competición nacional en 2025.
Río de Janeiro, Brasil. AFP.