Revista MadridistaReal
·17 de noviembre de 2024
Revista MadridistaReal
·17 de noviembre de 2024
Carlo Ancelotti tiene un dilema. Tras la vuelta del parón, el Real Madrid volverá a la acción y lo hará con el objetivo puesto en La Liga, en primer lugar, en un partido más complicado de lo que puede parecer a priori, contra el Leganés en Butarque. Tras el encuentro liguero, los blancos se verán las caras frente al Liverpool en Anfield, el próximo 27 de noviembre.
Apenas restan 10 días para el duelo entre gigantes correspondiente al partido número 5 de la Champions. El Madrid se la juega, tras perder ante Lille y Milan, por lo que otro tropiezo es impensable para la entidad y Ancelotti deberá reconstruir un equipo muy mermado por la plaga de lesiones, sobre todo en defensa. La ecuación es difícil, pero no imposible. Ancelotti y el equipo han superado cada adversidad que se han encontrado por el camino, y esta vez no será menos. O eso al menos es lo que creen en las oficinas del club blanco, donde depositan toda la confianza del mundo en sacar la situación negativa del club adelante.
Para la vuelta del vigente parón de selecciones, Thibaut Courtois estará más que preparado y recuperado para defender la portería blanca, después de haber sufrido, por segunda vez, la lesión en el abductor que padece desde el derbi del Metropolitano, y que recurrió semanas más tarde. El belga volvió ante el Celta, pero contra el Dortmund, volvió a lesionarse. Se perdió el Clásico, el encuentro ante el Milan y el último, del pasado sábado, frente a Osasuna. Su regreso será una noticia más que positiva para los intereses blancos, pero puede ser la única.
Carletto aún no sabe si podrá recuperar a Tchouaméni y/o a Lucas Vázquez, también lesionados. El francés se lesionó tras el partido frente al Milan, del que salió muy ‘tocado’ en lo personal, criticado por la la afición merengue. Aurelièn Tchouaméni está disputando su tercera temporada en Chamartín, y de momento no parece convencer y superar las expectativas que había puestas en él. El Madrid hizo un desembolso de 80 millones de euros por el jugador francés, y la paciencia se le está comenzando a agotar a la grada del Bernabéu.
En cualquier caso, para Ancelotti es una pieza fundamental, y su reaparición podría suponer una gran noticia para el técnico italiano. El pronóstico de su lesión era de un mes de baja, pero podría regresar antes de la previsto. Eso sí, de llegar a Anfield, tendría todas las papeletas para hacerlo como central y acompañar en el eje de la zaga a Antonio Rüdiger.
Por otro lado, Lucas Vázquez, que se lesionó del aductor izquierdo frente a Osasuna, podría también llegar a Liverpool, pero no es seguro. El pronóstico era «nunca menos de tres semanas», según pudo saber MadridistaReal directamente del Real Madrid, por lo que llegaría muy justo. El de Curtis es el único «lateral derecho» en la plantilla del primer equipo, tras la fatídica lesión de Carvajal. En caso de no poder jugar, el encargado de ocupar la demarcación sería Fede Valverde, que ya la ocupó ante los rojillos cuando se lesionó Lucas. Fortea podría ser otra de las opciones, pero parece poco probable que vaya a jugar de inicio ante los ‘reds’.
La novedad y a la vez la incógnita, es la de Raúl Asencio, el canterano que maravilló al Bernabéu contra Osasuna. Debutó por primera vez el pasado sábado, sustituyendo a Militao, y lo hizo a las mil maravillas. Jugó con autoridad, con confianza y determinación. Además, suya fue la extraordinaria asistencia a Jude Bellingham desde 60 metros, para el 2-0. Las grandes sensaciones que dejó fueron la clara muestra de que es un central hecho para jugar en el Real Madrid. El cuerpo técnico y Ancelotti quedaron alucinados con el joven canario y ya parece que podría instalarse en el primer equipo de manera definitiva.
El ‘rompecabezas’ del Real Madrid es un dilema que tiene que afrontar Carlo Ancelotti, que espera recuperar más efectivos tras la vuelta del parón, para ejecutar el plan trazado en Anfield. La victoria contra Osasuna y la derrota del Barcelona en Anoeta se sintió como un punto de inflexión, para permanecer más unidos y más fuertes esta temporada. El vestuario es consciente que si superan el reto de Anfield, volverán a estar en la pelea por todo.