Diario La Escuadra
·31 de julio de 2023
Diario La Escuadra
·31 de julio de 2023
La selección española ha sido goleada en el tercer partido de la fase de grupos contra Japón, en el duelo en el que estaba en juego la primera posición del Grupo C. El conjunto dirigido por Jorge Vilda ha completado un partido realmente pobre tanto con el balón como sin él, yendo ambas partes relacionadas entre sí. Al contrario de los dos primeros partidos, Japón ha planteado un partido de ceder el balón a España, esperar en bloque medio y salir al contraataque, aspecto donde la selección nipona ha puesto en evidencia las debilidades estructurales de las españolas y ha sido resolutiva para formalizar un resultado tan contundente.
España ha estado muy atascada con el balón. Frente a un buen bloque defensivo, trabajador y concentrado en cerrar los pasillos interiores, la selección española no ha tenido fluidez en la circulación de balón y el juego ha sido previsible. Mientras España ha sido incapaz de amenazar en el área rival, Japón ha castigado en transición marcando tres goles en tres tiros a puerta en la primera mitad. Todos ellos en transición y dejando en evidencia a la línea defensiva en su conjunto, sobre todo en el primero de los goles por la falta de coordinación al tirar el fuera de juego.
Rocío Gálvez, que debutaba en el Mundial por las molestias de la capitana Ivana Andrés, ha terminado por ser una de las principales señaladas por “salir en la foto” de los goles. También Irene Paredes por su mal pase en el tercer tanto. Lo cierto es que a España le falta estructura tras la pérdida de balón, pues las centrales han quedado expuestas ante la transición ofensiva rival. Como comentaba antes, lo que sucede con balón está directamente relacionado con lo que sucede sin él: si España no ataca bien y no está bien preparado en caso de pérdida de balón, difícilmente defenderá bien. Si las dos primeras jornadas se ha visto a una España recuperando balones en campo rival, contra Japón no ha sucedido.
España fue incapaz de ejecutar su idea de juego en la primera parte. El resultado de 3-0 hablaba por sí solo. Era el turno de Jorge Vilda, obligado hacer cambios para afrontar la segunda parte de mejor manera e intentar remontar el partido. Oihane entró en el lugar de Olga Carmona al descanso pero no hubo ningún cambio táctico ni emocional que tuviera impacto en el juego del equipo, pues todo continuó siendo muy previsible y Japón estaba excesivamente cómoda. El único tiro a puerta de España en la segunda parte fue de Esther, que entró en el partido en el minuto 82 sustituyendo a Salma Paralluelo, y por su parte, Japón consiguió marcar el cuarto gol mediante un golazo de Tanaka.
No funcionó el plan A y no existió un plan B contra una selección de Japón muy competitiva y que había dado un gran nivel en los dos primeros encuentros del Mundial. Era el partido que, aparte de dar la primera plaza del grupo, iba a medir el nivel real de la selección después de las victorias contra dos de los combinados más flojos del torneo. El resultado ha sido un dolorosísimo 4-0. “Se ha equivocado con el planteamiento, se ha equivocado durante el partido porque no ha mejorado nada y si tenemos que ser críticos, no ha mejorado también porque nos faltan jugadoras que deberían estar y no están”, comentaba Vero Boquete en el post partido de RTVE en referencia a las delicadas ausencias de Mapi León o Patri Guijarro por el conflicto ‘de las 15’.
Fuente de la imagen de portada: Twitter @SEFutbolFem