Nacional Es Pasión
·20 de mayo de 2025
NACIONAL LOS NECESITA A TODOS

Nacional Es Pasión
·20 de mayo de 2025
Por: Juan Felipe Velásquez.
Atlético Nacional volvió a caer. Esta vez, ante Águilas Doradas por 2-1 en el estadio Alberto Grisales, en un duelo correspondiente a la fecha 19 de la Liga BetPlay 2025-I. Fue la cuarta derrota en el torneo, una cifra que, si bien no escandaliza, sí enciende una alarma silenciosa: el equipo está perdiendo puntos importantes justo en el tramo más decisivo del semestre.
Los goles de Jesús David Rivas y Johan Caballero bastaron para dejar sin recompensa a un Nacional que logró empatar parcialmente con gol de Alfredo Morelos, pero que una vez más dejó la sensación de estar jugando con el freno de mano puesto cuando se recurre a la rotación. Porque hay algo que debe decirse con claridad: cuando Nacional pone a sus once mejores en cancha, el equipo juega. Funciona. Domina. Propone. Es una escuadra reconocible, intensa y, por momentos, brillante.
Imagen: Águilas Doradas.
Pero cuando hay que dar descanso, cuando se rota por calendario o estrategia, el panorama cambia. El equipo pierde chispa, pierde sincronía, pierde esa seguridad que marcan los diferenciales. Hoy por hoy, la brecha entre los titulares y los relevos está siendo demasiado amplia. Y en una institución como Atlético Nacional, eso no puede pasar.
El primer tiempo lo mostró con nitidez. Nacional comenzó mejor, generó opciones con Sarmiento y Morelos, incluso estrelló un balón en el palo. Pero fue Águilas quien abrió el marcador gracias a un desvío desafortunado. El empate de Nacional llegó tras una buena combinación ofensiva, pero la reacción no duró. En la segunda mitad, un rebote mal gestionado en el área le permitió a Caballero marcar el 2-1 definitivo. A partir de ahí, el equipo se mostró predecible, sin creatividad, y con pocas respuestas desde el banco.
No fue una derrota vergonzosa. De hecho, Nacional fue superior en pasajes del encuentro y dominó por tramos. Pero no lo suficiente. El partido fue parejo, con posesión compartida y con dos equipos que se neutralizaron más de lo que se superaron. La diferencia, una vez más, estuvo en los detalles. Y los detalles —en este deporte— también son parte del juego.
La preocupación crece porque ya no es un caso aislado. Cada vez que Nacional ha tenido que encarar partidos con nóminas mixtas o suplentes, el rendimiento ha bajado considerablemente. No es una crítica destructiva. Es un llamado a despertar. Porque el verde necesita respuestas inmediatas. No puede ser que haya tanto contraste entre el equipo titular y sus alternativas. Los que hoy son suplentes deben comprender que en Nacional no basta con entrenar: hay que rendir cuando se entra al campo. Esta camiseta no espera.
A nivel de tabla, las consecuencias son claras: el punto invisible está en riesgo. América y Tolima ya nos han superado y, si no ganamos en la última jornada ante Junior, podríamos quedar terceros, incluso cuartos. Y en un torneo tan parejo, donde los cuadrangulares se definen por un detalle, perder esa bonificación es dar ventaja. Una que no podemos darnos el lujo de regalar.
El partido contra Junior será, sin duda, una final. No por el morbo ni por el rival, sino porque representa la posibilidad de asegurar un mejor lugar para lo que viene. Allí no puede haber rotaciones ni excusas. Es momento de ir con lo mejor, de buscar esa versión afilada y agresiva que Nacional ha mostrado en sus mejores noches. No solo se juega un partido: se juega el cierre del semestre, el envión anímico, y la ventaja competitiva para pelear el título.
Imagen: Atlético Nacional Oficial.
Los errores del pasado deben servir de aprendizaje. El margen de error se reduce y las exigencias aumentan. Nacional sigue siendo un candidato al título. Pero para eso, necesita ser constante. Necesita que todos: titulares, suplentes, cuerpo técnico…