Osasuna Promesas 1-1 Nàstic de Tarragona: los once metros sirven el empate | OneFootball

Dos tantos de penalti en un encuentro gris

El Nàstic llegaba a Tajonar con el objetivo claro de asaltar el segundo puesto. Los granas contaban con un brutal desplazamiento de más de cien aficionados tarraconenses.

Se adelantaba el Osasuna

El Nàstic empezaba con una marcha más. Los granas (hoy de verde) apretaban arriba y conseguían robar en tres cuartos. El filial rojillo, desconectado en estos primeros compases.

Cuando mejor estaba el Nàstic, llegaba un jarro de agua fría. Penalti cometido por Juncà, que derribaba a Sixtus en el área y el árbitro decretaba pena máxima. Jon García transformaba desde los once metros en el minuto 14.

El gol hizo que el Osasuna se viniese arriba, estando ahora más presente en campo rival. Los rojillos estaban cerca del segundo a partir de los veinte minutos.

El Osasuna, ahora sí, muy superior. Los catalanes estaban muy por atrás en cuanto a sensaciones, sin llegar a portería rival.

Se encontró el Nàstic con el travesaño en el 45’. Centro de Migue Leal que remataba con la zurda muy escorado Narro, estrellando el balón contra la madera.

Llegábamos al descanso con un Osasuna de menos a más que ganaba por la mínima.

El Nàstic empataba

Sin ningún cambio en ninguno de los dos conjuntos. El Nàstic, eso sí, salió muy enchufado. Mucha intensidad ante un Osasuna que daba un paso hacia atrás.

Salvaba a los suyos Antonio Leal. Disparo del Osasuna y Varo dejaba el balón muerto, donde estaba apunto de llegar Sixtus. El ex de la Ponferradina se estiraba con todo para echar el balón.

El Nàstic seguía empujando y Jaume Jardí estuvo cerca de hacer el tanto del empate.

Tanto que llegaría poco después. En el minuto 74, Jaume Jardí centraba y un defensor rojillo la tocaba con la mano. El de Reus disparaba al centro y, pese a que Stamatakis tocaba con las piernas, el balón entraba.

Pudo hacer el segundo el Nàstic en el 78’. Centro lateral de Pablo que no llegaba a rematar Juncà.

El partido finalizaba con un empate que no contentaba a los pupilos de Dani Vidal.