Offsider
·31 de marzo de 2025
Pathé Ciss, un asegurador de puntos

Offsider
·31 de marzo de 2025
La pizarra, aquel elemento dotado de protagonismo diferencial cada temporada que avanza en el fútbol moderno. El crecimiento de la nutrición, de la táctica y de los métodos innovadores para la formación física de un futbolista, han igualado un deporte que, en la mayoría de las ocasiones, es de todo menos espectacular. Por ello, los partidos se rompen en los pequeños detalles, provocando muchas veces que el factor de la injusticia tome el papel de actor principal. Es aquí donde el Rayo Vallecano marca la diferencia. De estar cumpliendo su objetivo real a falta de 9 jornadas, a querer soñar por Europa para firmar un centenario mágico. Y en este detalle, es donde entra el papel relevante de Pathé Ciss.
El mediocentro defensivo ha aumentando sus registros como jugador gracias a un Íñigo Pérez que quedó impresionado desde su aterrizaje en Vallecas como primer entrenador. Pathé Ciss ha pasado de ser un suplente reducido de 20 minutos a acumular 11 titularidades consecutivas, salvo cuando ha estado lesionado o sancionado. En un Rayo Vallecano donde suele haber rotaciones, el ex del Fuenlabrada se ha asentado en el once inicial a sus 31 años. En sus virtudes, ha mejorado brutalmente con balón, pero lo que nadie esperaba es una subida en su rendimiento goleador. Además, ha pasado de ser el bombero apagafuegos cuando faltaba un central y entraba en esta demarcación por la falta de efectivos, a que nadie le mueva del mediocampo en las últimas fechas.
Las anotaciones de Pathé Ciss han dado de 9/9 puntos. Todas ellas, ante rivales directos como Valencia, CD Leganés y Deportivo Alavés. Desde el balón parado, siendo el rey del equipo en esta faceta. Lo que antes eran los lanzamientos de falta salvajes de Lejeune, ahora son los goles de un jugador que nunca lo ha tenido fácil para ganarse un puesto en sus cuatro temporadas con La Franja. Para que se entienda la importancia de estos hechos, sin estas contribuciones, el Rayo Vallecano tendría 31 puntos, es decir, en vez de estar a 13 puntos del descenso, estaría a 4. Una habilidad que se une a la virtud de Augusto Batalla desde los 11 metros. En dos de los tres partidos que marcó Pathé Ciss, Batalla paró 3 penaltis (dos ante la entidad pepinera y el reciente en el duelo contra El Glorioso). Asimismo, está a un tanto de Jorge de Frutos, el pichichi rayista, con 4 dianas.
Siempre con una sonrisa, su rendimiento no solo se basa en el juego. También ha ascendido de forma notoria en el vestuario, cuidando de los nuevos integrantes de la plantilla rayista así como su comunicación con sus compañeros en el terreno de juego. La prueba de ello fue como aconsejó a Pelayo Fernández en su debut. Junto a Batalla, siempre estuvo pendiente de sus acciones y le dio correcciones para que mejorara sus prestaciones. Sin dudas, el dorsal 6 es ahora mismo una de los rostros más reconocibles del Rayo Vallecano de Íñigo Pérez en todos los sentidos que se puedan pensar.