El Rincón del Fútbol
·27 de septiembre de 2024
El Rincón del Fútbol
·27 de septiembre de 2024
La igualdad 0 – 0 en el Campeón del Siglo lo clasificó al “manya” tras la victoria por la mínima en el Maracaná la semana pasada. El equipo uruguayo está en esta instancia luego de 13 años, donde también era dirigido por Diego Aguirre. Jugará ante Botafogo por un lugar en la gran final de América.
Se pueden dar muchos adjetivos para poner en palabras como estaba el estadio de Peñarol para recibir a su equipo ante Flamengo, pero cualquiera de todas ellas será poco y no cumplirá con el objetivo de describir de manera exacta el ambiente. Un verdadero infierno eran las tribunas del “carboné” al momento de que los equipos salieron al campo de juego. Una hinchada repleta de ilusión que busca su sexta Copa Libertadores desde 1988. Un año antes fue su última consagración y desde allí no pudo volver a coronar en el continente.
Vestido de blanco con la expectativa de revertir el resultado fue que Flamengo se presentó en Montevideo. Sin algunas de sus figuras producto de distintas lesiones, como la rotura de ligamentos de Pedro o la lesión muscular de Everton Cebolinha. Dos jugadores claves para el equipo de Tité. El ex DT de la selección brasilera no supo cómo resolver el dilema de jugar sin estos dos delanteros y en conferencia de prensa lo dejó notar. Donde también se notó fue en la cancha, porque al “mengao” le faltó mucha profundidad en ataque y casi nunca puso en verdadero peligro el arco de Aguerre.
Quién con orgullo buscaba anotar en el equipo visitante era Bruno Henrique pero el delantero jugó de número 9 reemplazando a Pedro y se dejó ver que esa no es su posición, porque sus mejores versiones se vieron desde la banda izquierda encarando para adentro buscando su perfil derecho. En esta ocasión tuvo que luchar con los centrales de Peñarol y ganarles de arriba. Una misión difícil.
Pasó el tiempo con el marcador en silencio y Peñarol buscó pasar los últimos minutos defendiendo con toda su fuerza la clasificación. En el minuto 88’ fue la jugada más clara del equipo brasilero en los pies de Gabriel Barbosa quién interceptó un centro de Wesley pero se encontró con la humanidad del número uno Aguerre. Una performance muy pobre por parte del club carioca que gastó millones de dólares para ganar su 4ta Libertadores pero tendrá que intentarlo el año próximo.
Quién seguirá en busca de este sueño es Peñarol, porque tras el pitazo final de Facundo Tello el aurinegro se clasificó tras más de una década a las semifinales del torneo más prestigioso de esta parte del mundo. La última vez que lo logró también fue bajo la dirección técnica de Diego Aguirre y la última vez que coronó (1987) el técnico uruguayo era jugador. Un verdadero héroe para el club. Jugará ante Botafogo para buscar la sexta.
Foto: El Ámbito