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Daniel Cadena Jordan·23 de agosto de 2018
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Daniel Cadena Jordan·23 de agosto de 2018
Ante el cuadro checo del Sigma Olomouc, el Sevilla necesitó de prácticamente la totalidad del partido para romper con el cero.
Tras el formidable comienzo en LaLiga demostrado por el Sevilla en este ciclo técnico bajo el mando de Machín, se esperaba que la visita a la República Checa, donde se medían ante el Sigma Olomouc por la cuarta ronda de la Europa League.
Una primera parte floja, en la que fueron los locales los que generaron las poquísimas ocasiones de incidencia, todas desviadas o de bajo impacto al momento de ser definidas.
De la segunda mitad quedará la preocupación en torno a Muriel, no necesariamente por dolores físicos, sino por la pobre capacidad de definir del colombiano. Tuvo la más clara del encuentro, hasta el momento, tras un pase desde la línea medular que dejó al delantero uno contra uno con el portero rival, solo para rematar desviado por fuera del poste derecho.
Sarabia sería el salvador de la velada con un gol in extremis que haría olvidar, en algo, lo botado por Muriel. El 0-1 que rescató el ex del Getafe a los 85 minutos de acción le vale al Sevilla para ir al Sánchez Pizjuán a finiquitar la clasificación a la fase de grupos de la Europa League, el próximo 30 de agosto.