Saúl Ñíguez y su posible resurrección futbolística  | OneFootball

Tras una última etapa con más sombras que luces, Saúl firma por el Sevilla. En La Filigrana analizamos al futbolista ilicitano atendiendo a diferentes cuestiones

“Tiene condiciones únicas. Es un perfil para jugar asociativo, en equipo, más defensivo, tiene llegada. Tiene todo para ser un jugador importante en la selección, pero tiene mucha competencia”. Así lo definió Luis Enrique cuando Saúl era una pieza clave en el Atlético de Madrid y la Selección Española. El nuevo fichaje del Sevilla FC encara una etapa decisiva a la par que ilusionante en la que buscará redimirse como futbolista tras unos años muy difíciles en lo deportivo y en lo personal.

A García Pimienta le llega un perfil diferente al que sorprendió a Europa con su juventud, aunque la posibilidad de reencontrarse con su mejor nivel genera cierta esperanza en el plantel blanquirrojo. Saúl, de 29 años y 1’84 metros de altura, aterriza en la capital hispalense en una fase plena de maduración futbolística.

El mejor Saúl, un jugador superlativo

Durante varias temporadas, hubo un futbolista que maravilló al mundo con grandes noches de fútbol en competiciones como la Champions League. Esta espectacular versión de Saúl Ñíguez destaca por su polivalencia y habilidades técnicas en el campo. Su capacidad para avanzar con la posesión del balón es notable en diversas circunstancias, ya sea mediante combinaciones en espacios reducidos, pases largos hacia adelante o regates. Pese a esta cualidad ofensiva con balón, suele enfocarse en la fase de iniciación o apoyo de los ataques, utilizando también su pie derecho bajo presión para buscar salidas efectivas. Una de sus características más conocidas es el golpeo, especialmente con la zurda, su pierna hábil.

En el aspecto combinativo, Saúl es habilidoso en la ejecución de pases a la espalda de la defensa, tanto en distancias algo más reducidas como en desplazamientos en largo. En territorio ofensivo canaliza el juego hacia los pasillos interiores, buscando siempre ese hueco limitado que se produce entre el lateral y el defensa central. La capacidad que posee para recibir y asociarse con pocos toques le hace ser útil en la producción de jugadas rápidas de ataque.

Como es frecuente en un mediocampista, presta vital atención a la orientación con respecto al balón y al rival, para poder dar el pase en la mejor condición posible. Con respecto a la fase ofensiva, Saúl domina ese ‘timing’ en las llegadas e intuye muy bien los espacios, sobre todo en banda izquierda. Tiene la inteligencia para generar arrastres o intuirlos y, ahí, producir peligro liberado de marca. Gran parte de sus asistencias llegan de dicha manera.

Con el Atlético de Madrid ha desempeñado múltiples roles. Principalmente, se le ha visto junto a Koke en la medular del famoso 4-4-2 de Simeone. En este esquema, Saúl solía servir de apoyo a los laterales y delanteros. Contaba con la responsabilidad de jugar rápidamente el balón. Además, era el encargado de realizar la presión en una línea más alta, quedando Koke algo más replegado. Cuando partía desde un mediocampo de tres, Saúl caía hacia una posición más retrasada para recibir y enlazar el juego hacia la medular o su lateral izquierdo, todo ello para salir de la presión.

En general, el Saúl que brilló con la camiseta del Atlético se puede definir como un buen organizador de juego, que cuenta con cualidades físicas que lo convierten en un todocampista y hace que pueda jugar en varias posiciones. Asimismo, su rapidez en la conducción, unido a su golpeo y tendencia al regate, lo hacen un virtuoso en producción de acciones de gol.

Polivalencia

Saúl es un futbolista capaz de adaptarse a diversas demarcaciones. Puede desempeñar las funciones de carrilero o medio izquierdo. En las ocasiones en las que jugó en la banda izquierda por delante de los tres defensas (3-5-2), proporcionaba amplitud en ataque con desdoblamientos por fuera. Las cualidades físicas ya mencionadas le permitían realizar carreras de repliegue, defender en uno contra uno en zonas amplias y ser un elemento constante de la defensa de cinco en bloque bajo.

Pese al buen nivel ofrecido en sus inicios como carrilero, a Saúl no le gusta trabajar en posiciones alejadas a la de centrocampista. Esto le hizo marcharse al Chelsea allá por 2021, aunque su etapa en Inglaterra no fue nada fructífera. Cabe destacar que Saúl también ha jugado de central, donde destaca su paso por el Rayo Vallecano.

Nivel actual

Tras haber desgranado las características del jugador en su máximo apogeo, es necesario resaltar que, actualmente, Saúl está lejos de ese nivel. A día de hoy, vemos a un futbolista con aptitudes físicas algo menores, aunque destaca en duelos, principalmente aéreos. En sus últimos años en el Atlético de Madrid, la principal diferencia apreciable es que se le ve más lento en transiciones y que asume poco riesgo en las decisiones.

Son varias las razones que se especulan sobre este descenso en el rendimiento, aunque la mayoría pasan por problemas de mentalidad. Saúl firmó un buen arranque de temporada, tras el que poco a poco se fue diluyendo hasta convertirse de nuevo en un jugador que completaba partidos sin pena ni gloria. Salvo en situaciones donde no había más remedio, el Cholo Simeone lo ha usado como tercer o cuarto cambio en un gran porcentaje de encuentros.

La adaptación al esquema de García Pimienta

A modo de comparación, se puede decir que Saúl y el Sevilla pasan por una situación similar, salvando distancias. Después de llegar a un pico alcanzable por muy pocos, para posteriormente atravesar una racha muy delicada, ahora ambos cruzan sus caminos en la persecución de un mismo objetivo, resurgir. La llegada de un futbolista como Saúl a la firma de García Pimienta genera ciertas expectativas. Pese a que últimamente no se ha encontrado cómodo en la creación de juego, es una cualidad que en un pasado ha demostrado tener. Quizás no tanto en el Atlético, sino en la Selección Española donde el sistema era más parecido al que tratará de plasmar García Pimienta. Con figuras de contención a su lado, como puede ser Sambi Lokonga, Saúl tiene la oportunidad de recuperar esa faceta más generadora y llegadora que tanto le caracterizaba.

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