ECUAGOL
·23 de mayo de 2024
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Walter Montoya, es un exmediocampista celeste, hoy es parte de Central Córdoba, en el futbol argentino, sin embargo, sigue apoyando al conjunto celeste, en el que hoy en día juega su viejo amigo, Lorenzo Faravelli.
En una entrevista con La Afición, Montoya contó la historia de cómo comenzó esa gran amistad, pues ambos grandes jugadores, se conocieron en la academia Jorge Griffa, cuando eran adolescentes.
“Estábamos en una academia juntos, era una academia en la que te formabas, te veían los clubes de Primera División Argentina y te llevaban. Éramos de la misma categoría, jugamos muchos partidos juntos”, comentó.
“Yo era de muy lejos, del interior de Argentina y como él es de Rosario, sus padres siempre me llevaban a comer a su casa o me llevaban a distintos lugares para que conociera, porque yo vivía en una pensión con muchísimos chicos. Sus padres siempre me llevaban a cenar a su casa o a un restaurante para que fuera algo distinto y siempre voy a estar agradecido”, posterior a eso se convirtieron rivales, justo en el clásico de la ciudad entre Rosario y Newell´s, hasta que Walter emigró al futbol europeo con el Sevilla y Faravelli siguió su camino en Ecuador.
“Después él pasa a Newell’s Old Boys, en Rosario, y yo sigo un año más en Griffa; él debuta y yo paso a Rosario Central y jugábamos clásicos. Nos volvimos a encontrar en una selección que había en Rosario, estaban los mejores de esa categoría y jugábamos un amistoso. Nos dejamos de ver, después vi que estaba en Independiente del Valle y después me da la sorpresa que va a Cruz Azul. Pensé que eso era muy bueno”, mencionó ya gregó: “Fueron los primeros pasos de uno cuando está chiquito y ojalá que le vaya bien, se merece esto él y su familia”.
Montoya, llegó a La Maquina en el 2018, y parecia que podría seguir con el legado del Chaco Gimenez. Fue parte de la plantilla en el Sudamericano que disputó la final contra el América en la Apertura 2018, título que se quedó en Coapa.
Tiempo después, debido a diferencias con Pedro Caixinha, quien era el entrenador del equipo en aquel entonces, aceptaron la petición del jugador de querer salir del club, a pesar de tener un contrato vigente y regresó a la Maquina para el 2021.
“Creo que eso fue fundamental, formamos una familia, nosotros nos juntábamos a cenar, comíamos asados y compartíamos quizás cosas mínimas que hacían mucho y eso fue fundamental. Era una unión increíble, todos queríamos ganar, hasta a veces gente que no era de Cruz Azul y que quería que nos fuera bien, se sentía que lo hacían de buena fe y eso fue importantísimo. El grupo que hizo Juan fue espectacular, siempre estábamos juntos”, puntualizó.
Montoya, además de llevarse el título de liga, fue campeón de Copa mx del 2018, trofeo que, de hecho, lleva tatuado y el campeón de campeones del 2021.