Offsider
·19 de diciembre de 2024
Offsider
·19 de diciembre de 2024
El Tottenham firmó un encuentro casi perfecto. Su rendimiento fue excelente hasta que Forster fue engullido por los nervios y el Manchester United recortó distancias hasta en dos ocasiones. Sin embargo, el conjunto londinense logró avanzar a las semifinales de la Carabao Cup tras «sentenciar» al inicio de la segunda mitad doblegando su ventaja en apenas diez minutos. Solanke marcó dos, Kulusevski acompañó al inglés y el gol olímpico de Son al borde del final derrumbó una posible remontada. Aunque los chicos de Amorim apretaron con los tantos de Zirkzee y Diallo, el posterior 4-3 de Evans supo a poco.
El Tottenham comenzó el partido avisando a Bayındır y siendo el dueño del balón en los compases iniciales. Maddison ayudaba a descongestionar la sosegada presión del Manchester United, que buscaba a Højlund para descargar y crear espacios. No obstante, y a pesar de que los Red Devils parecían despertar, los locales golpearon primero. En el 15′, Pedro Porro probó fortuna con un potente disparo desde la frontal, pero el propio Bayındır no despejó con claridad y Solanke aprovechó las dudas para poner el 1-0 tras recoger el rechace en el área.
La reacción visitante fue la esperada, aumentando la intensidad hasta el punto de precipitarse y acabar con Mazraoui sancionado después de barrer a Spence. Era un ida y vuelta constante, con ocasiones para ambos lados. Eriksen tuvo el empate en sus botas en el 23′, aunque su remate con la izquierda fue repelido por la zaga londinense. Por su parte, Kulusevski contraatacó dos minutos después desde el sector zurdo, sin éxito gracias al buen posicionamiento del guardameta turco. El sueco demostró estar en un gran estado de forma otro día más, muy activo en campo rival y causando estragos.
Bruno Fernandes inventaba, pero el resto de sus compañeros era incapaz de apartar los nervios. Más bien, la timidez de aquel que le toca exponer en clase y se sonroja ante el miedo escénico. Para colmo, Amorim se vio obligado a sustituir a Lindelöf debido a problemas físicos y Evans entró con el descanso al borde de la esquina. Mientras, el Tottenham juntó a Son, Maddison y compañía para neutralizar a los chicos de Manchester. Sin embargo, y tras añadir dos minutos de descuento, la ventaja seguía siendo mínima para el bando local, aunque con más certezas que los Red Devils.
Solanke hizo el 1-0 / Fuente: X @SpursOfficial
No le duró nada la tranquilidad al Manchester United. Nada más arrancar, Kulusevski materializó el 2-0 para el Tottenham después de cazar otro rechace en el área. El extremo remató con la derecha el intento de despeje de Lisandro para dejar congelados a los pupilos de Amorim. Lejos de ello, los Spurs mantuvieron el dominio e hicieron el tercero en el marcador en el 54′. De nuevo Solanke, que aprovechó el despiste de Evans para zafarse posteriormente de Lisandro y convertir su doblete personal con un disparo raso y ajustado. El estado anímico de ambos cuadros reflejaba una diferencia demasiado notoria.
El técnico luso introdujo un triple cambio para tratar de despertar o, al menos, maquillar el resultado: Diallo, Mainoo y Zikzee reemplazaron a Antony, Eriksen y Højlund. Y el plan, para sorpresa de muchos, tuvo efecto gracias al guardameta rival. Primero fue Zirkzee, que tuvo dos ocasiones, una de ellas válida para poner el 3-1. Forster, héroe en la acción anterior, demostró que el juego de pies no es su fuerte y el neerlandés aprovechó el regalo de Bruno para recortar distancias. En el 70′, fue Diallo el encargado de apretar con el 3-2, donde también salió señalado el arquero local.
En cuestión de unos minutos, el Tottenham había echado a perder toda la superioridad mostrada en la primera hora de partido. Y Postecoglou no movió el banquillo hasta el 79′ con la entrada de Bergvall por Maddison, amonestado un minuto antes. Pese al nerviosismo local y el sentimiento de culpa de Forster, los Spurs lograron cerrar el choque gracias a Son, su capitán y emblema, que se inventó un gol olímpico que desató la euforia local y la desesperación visitante. Una obra de arte para poner en bucle. Evans convirtió el 4-3 definitivo en el descuento, aunque sirvió poco porque el final fue el mismo.
Los cambios le funcionaron a Amorim / Fuente: X @ManUtd
XI Tottenham (4-2-3-1): Fraser Forster; Pedro Porro, Radu Drăgușin, Archie Gray, Djed Spence; Pape Sarr, Yves Bissouma; Dejan Kulusevski, James Maddison (Lucas Bergvall, min. 79), Heung-min Son (C); Dominic Solanke.
Goles Tottenham: Dominic Solanke (min. 15, min. 54), Dejan Kulusevski (min. 46), Heung-min Son (min. 88).
Amonestaciones Tottenham: Pape Sarr (min. 23), James Maddison (min. 78), Lucas Bergvall (min. 90+8).
XI Manchester United (3-4-2-1): Altay Bayındır; Leny Yoro, Victor Lindelöf (Jonny Evans, min. 45), Lisandro Martínez; Noussair Mazraoui, Christian Eriksen (Kobbie Mainoo, min. 56), Manuel Ugarte (Alejandro Garnacho, min. 70), Diogo Dalot; Antony (Amad Diallo, min. 55), Bruno Fernandes (C); Rasmus Højlund (Joshua Zirkzee, min. 56).
Goles Manchester United: Joshua Zirkzee (min. 63), Amad Diallo (min. 70), Jonny Evans (min. 90+4).
Amonestaciones Manchester United: Noussair Mazraoui (min. 25), Altay Bayındır (min. 88), Bruno Fernandes (min. 90+2).
Situación: El partido tuvo lugar en el Tottenham Hotspur Stadium (Londres), estadio con capacidad para 62.850 personas.
Colegiados: John Brooks (árbitro principal), Gavin Ward (4º árbitro), Simon Bennett y Daniel Robathan (asistentes).
Incidencias: Victor Lindelöf fue sustituido al borde del descanso debido a molestias físicas.