Offsider
·28 de noviembre de 2024
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·28 de noviembre de 2024
Ya se sabe la fecha oficial del partido que enfrentarán a Unionistas y Rayo Vallecano. Será el miércoles 4 de diciembre, en concreto, a las 19:00 horas en el Estadio Reina Sofía. Un escenario que pone en alerta a los franjirrojos y, asimismo, trae recuerdos de esperanza al conjunto local. Para los de Íñigo Pérez, van a tener enfrente un equipo que ya sabe eliminar a un Primera. Fue la campaña pasada, cuando se cargó al Villarreal en uno de los partidos más curiosos de la historia de la Copa del Rey.
Un arbitraje polémico, un apagón, una duración de 48 horas y, para rematar la película, una tanda de penaltis. Aquel 7-8 de enero será inolvidable el ‘Unionistazo’ que tuvo que sufrir Marcelino García Toral en su apertura como técnico del Submarino en el inicio de su segunda etapa como técnico groguet. Por ello, Unionistas comenzó el 2024 con una fiesta interminable, pero quiere acabar el mismo con otra que le sirva para ser etiquetado como el ‘Matagigantes’ del fútbol moderno. Es decir, el Rayo Vallecano tendrá delante un rival que, psicológicamente, está listo para cualquier escenario. Situado como el undécimo del Grupo 1 de Primera RFEF, es una posición que engaña y mucho. Sólo dos derrotas en 14 partidos. Entonces…¿Por qué va en este puesto? Muy sencillo, es el rey del empate. 10 tablas son las que suma el equipo entrenado por Daniel Llácer. Así que…cuidado, hueso duro.
Pero volviendo a la historia, el Unionistas dejo KO al Villarreal tras sobrevivir a un capítulo de infortunios. Si bien es cierto que Dani Parejo, Álex Baena o Gerard Moreno llevaron la batuta de aquel encuentro, también hay que decir que las ocasiones más claras fue la de una entidad humilde que no perdió la cara al choque en ningún momento. Un penalti no pitado, un escandaloso gol anulado y, para recibir el golpe definitivo, un golazo de Ilias Akhomach que parecía matar la ilusión del pequeño contra el gigante. Pero como dice el lema, «Unionistas nunca se rinde» y en el último aliento, ahí llegó el milagro. Penalti en el minuto 87 para poner el empate y forzar la prórroga.
Cuando todo parecía que se resolvería aquella noche, un apagón forzó la suspensión donde aún no se sabe la historia real para adoptar la decisión final de posponer el partido. El tiempo extra se tuvo que jugar a las 16:30 del día siguiente y ahí, Unionistas fue netamente superior. Dio igual que fuera lunes, en horario laboral o como si hubieran pasado 3.000 aspectos más. El plantel de Dani Ponz avasalló, pero no encontró el premio del gol. Si lo iba a tener en los penaltis, sobreviviendo a la magia de Pepe Reina y finiquitando el pase con un 7-6 desde los 11 metros.
Ahora, toca un Rayo Vallecano que llega en un momento irregular y con la imagen de pasotismo de algunos suplentes como James Rodríguez o RDT, que han desatado la polémica en la semana reciente. Vallecas necesitará una inyección moral ante el Athletic en la jornada liguera, por cierto, vigente campeón de la Copa del Rey. Sin dudas, hay necesidad de un chute de energía antes de visitar a uno de los caramelos envenenados del sorteo celebrado ayer en Las Rozas.