Uruguay desespera a una pobre Brasil que además perdió a Neymar (2-0) | OneFootball

Brasil se ha metido en problemas en este parón de selecciones. En dos partidos de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de 2026, la 'canarinha' solo ha podido sumar un punto, en el empate contra Venezuela (1-1). Durante la madrugada de este miércoles, ofrecieron una muy pobre versión en su visita a Uruguay que supuso el final a su facha de 37 partidos consecutivos sin perder en eliminatorias. La selección, entrenada por Fernando Dinz, no carbura.

Ya en el partido frente a Venezuela habían sido más sombras que luces, pero los -malos- pronósticos se han confirmado en un Estadio Centenario que, por otra parte, ha confirmado que tiene con qué ilusionarse con el proyecto liderado por Marcelo Bielsa. Va comenzando, desde cero y con protagonistas muy diferentes, pero hay una base muy fuerte y jugadores que vuelven a querer imponerse. Es un proyecto en construcción, pero con unos cimientos muy resistentes. Y ante Brasil se ha notado.

La paciencia de Uruguay fue suficiente

El enfrentamiento ha tenido varias mini historias, pero si ha existido una constante ha sido la incapacidad de la pentacampeona de generar peligro real. En la primera mitad, Vinicius Jr, Neymar, Rodrygo o Gabriel Jesús merodearon el área constantemente, sin oposición, pero Rochet no vio el peligro. Manuel Ugarte, que ha dado continuidad a su estado de gracia en el PSG, se multiplicó para sostener a los charrúas cuando peor la pasaban.

Uruguay, que esperaba tranquila sus oportunidades, se valió del desacierto de los visitantes y se armó de paciencia para esperar la chance de oro, que llegó a los 42 minutos con una gran acción de un Maximiliano Araújo que se fue hasta línea de fondo para poner un balón medidito que Darwin Núñez remató a placer directo al arco. El Estadio Centenario celebraba y comenzaba la hazaña.

Dawin Nuñez completó la obra de Uruguay

La primera mitad acabó con la lesión de Neymar Jr, que se retiró en camilla  ha encendido todas las alarmas. Fue el detonante para que Brasil acabara de caerse y diera espacio para que Uruguay creciera en su juego. Dinz intentó cambiarle la cara al equipo con más alternativas ofensivas, pero la historia no cambió. Empeoró. Darwin volvió a vestirse de estrella con una gran asistencia para que De La Cruz anotase su gol y cerrara la noche inmaculada en Montevideo.