Wanderers puede ser la sorpresa del Torneo Intermedio | OneFootball

El equipo dirigido por Antonio Pacheco está en la pelea y al acecho para quedarse con un boleto a la final

El partido que enfrentará a Peñarol y Defensor Sporting el sábado a las 17.30 en el Campeón del Siglo es el que se lleva todas las luces en virtud de que es como una final, pues si hay un ganador se adjudicará el grupo y con ello el pasaje a la final del Intermedio. Sin embargo, a la misma hora se jugará en paralelo otro juego muy importante y es el que protagonizarán Wanderers y Deportivo Maldonado en el Parque Viera. La razón de que se juegue en paralelo es porque el bohemio también tiene posibilidad de encabezar la serie.

En silencio, casi sin levantar sospechas, Wanderers se metió en la pelea del Intermedio. No es un equipo que brille, pero sí es muy efectivo. Desde la llegada de Antonio Pacheco ha ido de menos a más en el rendimiento, con buenas performances incluso en partidos en los que obtuvo resultados no tan positivos.

No tiene grandes estrellas, pero sí futbolistas de rol que entienden cuál es su aporte al colectivo y a partir de allí el técnico ha construido un equipo de buen funcionamiento.

El bohemio se quedó con el invicto de la temporada de Peñarol al vencerlo en la primera fecha del Intermedio por un 2-0 que reflejó lo que ocurrió en la cancha, porque dominó al mirasol. Luego sufrió un par de derrotas que parecieron apagarlo, pero reavivó su llama y en los siguientes tres choques no perdió: empató uno y ganó los últimos dos. Luego de haber finalizado noveno en el Apertura, ya subió al séptimo lugar de la Anual y se metió en posiciones de Copa Sudamericana.

El andar bohemio ha sido muy bueno y los números comparativos lo revelan.

Wanderers tiene como contra para esta última fecha que no depende de sí mismo. Necesita ganar, pero que además Peñarol y Defensor Sporting empaten, pues si hay un ganador en ese juego será el que se quede con el primer lugar y el  boleto a la final, pero Wanderers está al acecho. En silencio, agazapado y esperando el momento para dar el zarpazo justo y quedarse con un lugar que la mayoría da por descontado que ocupará Peñarol o, en su defecto, Defensor.