Revista MadridistaReal
·21 septembre 2024
Revista MadridistaReal
·21 septembre 2024
Todo el madridismo sigue echando de menos a Toni Kroos pero la misión de Ancelotti es hacer que eso ocurra lo menos posible a base de victorias. Sin embargo, en el Santiago Bernabéu se respira un ambiente extraño a la hora de conseguir las victorias porque no se logran fácilmente. La lenta circulación de balón en algunos tramos de los partidos hace que los movimientos de los jugadores merengues sean demasiado predecibles, además de los problemas en la salida de balón y algunas imprecisiones que provocan la pérdida de duelos.
En Madrid pueden estar tranquilos, al menos por ahora porque si por algo se caracteriza Carletto es por saber solucionar los problemas sin hacer saltas las alarmas. Ya se rumoreaba que un cambio de sistema podría ser la tecla que mejoraría el juego del combinado madridista y, con la vuelta de Bellingham y Tchouaméni junto con la inminente recuperación de Camavinga, coge cada vez más fuerza esa opción. El técnico italiano medita volver al 4-4-2 para dejar atrás al 4-3-3 al que se cambió con la llegada de Mbappé y al que el equipo parece que aún no se ha adaptado.
Cuando ha sido preguntado en rueda de prensa por el posible cambio de sistema de juego, Carlo Ancelotti ha contestado: «Es algo que estamos evaluando. Nos han generado muchas oportunidades, no significa que debamos defender mejor sino que a veces tenemos que enviar el balón más largo. A veces, es una solución para evitar problemas». Como dice el entrenador merengue, las pérdidas de balón y el brutal daño que son capaces de hacer los oponentes en el área también es preocupante. El mejor ejemplo es el partido contra el Stuttgart en el que Courtois se vistió de santo o el duelo ante la Real Sociedad en el que los vascos se toparon hasta 3 veces con el poste.
No es una solución segura sacrificar a un delantero para incorporar a un centrocampista más en la medular, pero tal vez jugar con 4 centrocampistas pueda hacer que el equipo tenga más dominio en el centro haciendo llegar balones más fácilmente a los delanteros y ayudando mejor a la defensa. Mientras el madridismo exige victorias con un buen juego, Carlo Ancelotti busca la solución con diferentes experimentos para acabar con un dolor de cabeza que podría ser perjudicial en el tramo decisivo de la temporada.