Iniestazo
·3 février 2025
Iniestazo
·3 février 2025
Esta Liga me recuerda a la de la temporada 2020-21. Parece que no la quiera ganar nadie y a estas alturas apunta a que se la llevará el “menos malo” que se suele decir. Le cuesta encontrar soluciones al Barça de Flick ante esos equipos que optan por cerrarse, parar el juego y tirar de contras. Pero a diferencia de otros encuentros, esta vez salió cara. Cuando daba la sensación de que no era el día apareció el chaval. Es increíble lo que mueve Lamine y cómo levanta él solito a la afición de la butaca. Su volea y la fe ciega de Lewandowski acabaron por darle un triunfo que implica algo más que tres simples puntos. Significa reengancharse a la Liga tras el pinchazo del Madrid y con el derbi de la capital aguardando la próxima semana.
En una primera parte con hasta doce faltas del Alavés, el cuadro babazorro no vio ninguna amarilla, mientras que el conjunto azulgrana fue apercibido con hasta dos tarjetas. Lamine, indignado con Munuera, insistió hasta encontrar su premio, Pedri volvió a maravillar entre líneas y Szczesny hizo de las suyas con varias salidas precipitadas. Por otro lado, Gavi tuvo que ser sustituido por Fermín López tras sufrir un traumatismo craneoencefálico en un choque de cabeza con Conechny. Y por suerte todo ha quedado en un susto para ambas partes.
Flick acertó con los cambios y la entrada de Frenkie de Jong y Eric García dio una marcha más. Y es que el central de Martorell está a un nivel excepcional y su salida de balón ayudó a impulsar al equipo hacia adelante junto al excelso Pau Cubarsí.
Luego ya cuando Lamine Yamal saca la barita acaba por desequilibrar el partido. Avisó primero con una jugada maradoniana y pasada la hora de juego con un disparo envenenado que sacó a mano cambiada Owono. Fue precisamente en la jugada siguiente que asistió a Lewandowski con una volea y la fortuna del rechace. 30 goles para el ariete polaco, que encamina la ‘pole position’ por el pichichi. El grito de liberación a sabiendas de lo que acarreaba volvió a poner en valor al infravalorado unocerismo.
Foto portada, vía: FC Barcelona Twitter