Álvaro Carreras presentó su candidatura para el lateral izquierdo del Barcelona | OneFootball

El FC Barcelona tuvo una buena impresión de lo que puede ofrecer Álvaro Carreras defendiendo el costado izquierdo durante el choque del martes en Lisboa (4-5). En una noche de terror tanto para la zaga de las 'águilas' como para la defensa azulgrana, el de Ferrol completó, en líneas generales, un buen partido a pesar del penalti cometido sobre Lamine Yamal en la segunda parte.

Carreras sorprendió a la defensa culé nada más iniciar el encuentro, con un buen desborde por su banda en donde aprovechó la pasividad de Jules Koundé para sacar un centro que encontró a Vangelis Pavlidis libre entre los centrales catalanes para poner el 1-0 antes de cumplirse el minuto 2. Después, el '3' se las ingenió para anular a Lamine durante buena parte de la noche, provocando varias pérdidas de balón y malas decisiones por parte del extremo del Barça, algo poco usual.

Lamine acabó festejando en el mano a mano contra Carreras

Hasta el minuto 77, Álvaro sonreía en una noche en la que todo parecía salirle bien al Benfica. Sin embargo, en un parpadeo del '3', Yamal logró provocar un penalti tras un claro jalón del defensor español, quien en su afán de impedir el remate del extremo acabó derribándole. Aunque el '19' exageró la caída, el principal Danny Makkelie, de floja actuación arbitral, no dudó en señalar la falta dentro del área.

Robert Lewandowski se encargó de hacer efectivo el cobro, anotando un gol que abrió la puerta a la histórica remontada del Barça en el tramo final del encuentro. A pesar de la falta sobre Lamine, Carreras fue, por lejos, el mejor de la zaga lisboeta, con 25 de 31 pases completos (81 %), 5 duelos ganados y 7 perdidos, además de 10 balones recuperados y un total de 13 acciones defensivas ejecutadas.

El de Ferrrol tiene contrato hasta junio de 2029 y, difícilmente, el Benfica le deje salir por menos de 40 millones de euros, valor estimado de su cláusula. Más allá de la derrota de su equipo, el zaguero de 21 años presentó sus credenciales como posible alternativa a Alejandro Balde el próximo verano. Un Balde, que, por cierto, no estuvo ni mucho menos brillante en Lisboa en labores defensivas, una constante para el catalán en sus últimas presentaciones. En ataque, su rendimiento es notablemente mejor.