‘Juanfer’ le echó sal a la herida de Néstor Lorenzo | OneFootball

El técnico tiene que ayudarse

Hay cosas que salen al revés, y lo de Juan Fernando Quintero le salió al revés a Néstor Lorenzo. Es muy de malas el director técnico de la Selección Colombia porque, preciso después de la polémica por no ponerlo contra Paraguay, ‘Juanfer’ marca tremendo golazo con el América de Cali ante el Boyacá Chicó.

«Lorenzo, no pusiste a Quintero»; «Lorenzo, hiciste el cambio que no era»; «Lorenzo, estabas errático»; «Lorenzo, quedaste petrificado». Cosas como estas le dice todo el mundo al entrenador argentino y, tras del hecho, esta actuación de ‘Juanfer’ le echa sal a la herida.

Es una coincidencia fatal para el técnico, que debe estar revolcándose mientras piensa por qué no metió a Quintero. «¿Cómo fui a hacer semejantes cambios y dejar por fuera a este jugador?», se ha de estar preguntando.

Hablando donde deben hablar los jugadores, en la cancha, el volante creativo del América le dijo a Lorenzo: «vea lo que usted se pierde por no ponerme a mí». Pero esto no es algo particular de Lorenzo. Nadie duda que Quintero debe ser convocado porque tiene muy buenas condiciones, pero los técnicos de la Selección en la última década casi no lo ponen. Cuando ‘Juanfer’ está, suele ser suplente.

Tal vez Lorenzo pensó que no tenía cómo marcar un tercer gol; por eso habrá querido cerrar el partido jugando a la defensiva y metiendo a otro defensa central, Yerry Mina. Eso es algo que normalmente no se hace a los 60 minutos del partido sino del 80 en adelante, y menos jugando en condición de local. No creo que tuviera la razón al pensar así, pero eso no es lo grave.

Lo grave es que, al recibir el gol del empate, no entendió que le sobraba un zaguero. Como Paraguay se echó hacia atrás, no había por qué jugar con tres centrales. Quedaba más de media hora y se podía rearmar todo, pero el técnico no lo hizo.

Nunca nadie encontró una explicación para que ‘Juanfer’ se quedara en el banco. La gente sigue tan ardida con eso, y no se lo perdona a Lorenzo. Si usted quiere defenderlo, no encuentra eco en ninguna parte. Yo he apoyado a Lorenzo, pero él no se ayuda últimamente.