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El Atleti tenía que ganar y ganó. Lo hizo sin dudas, desde el minuto uno, imponiendo la jerarquía que se ha ganado en esta era dorada de Simeone, donde ha pasado de ser un desconocido en Europa a uno de los equipos respetables, uno de los nombres que siempre aparecen, que siempre están. Goleó y mantuvo su posición, ya que el resto de rivales, fundamentalmente Arsenal e Inter, también hicieron su trabajo. Termina la fase primera de esta nueva Champions en una meritoria quinta posición, evitando así la ronda de dieciseisavos, que disputarán equipos como el Real Madrid, Bayern de Munich, PSG o Manchester City, entre otros. Simeone rules.

El Atleti salió con ímpetu, con intensidad, para no dejar ninguna duda al equipo austriaco de quién iba a dominar y a ganar el partido. Todo eso se representó de una manera precisa en la punta derecha del ataque. Simeone hijo era una explosividad incontrolada que robaba, percutía, regresaba y así como si hubiera entrado en un bucle inevitable. En trece minutos había marcado el primer gol, en un derechazo cruzado desde dentro del área, y había servido en bandeja a Griezmann el segundo, en una jugada muy de su estilo, velocidad al espacio, pelearla hasta el final, superar al portero y dársela al compañero. Con el partido resuelto el Atleti tomó respiro y le entregó la pelota al Salzburgo, que no supo hacer con ella. Podríamos decir que descansó de tantos partidos, de tanta presión, pero antes del final, para poner la distancia necesaria, Griezmann remató una contra, esta vez por la izquierda, el flanco de Lino, que asistió al francés para poner el cero a tres justo antes de marchar a la caseta de vestuarios.

La segunda parte no tuvo historia. Cambios, descansos, rotaciones, un cuarto gol de Llorente y también el tanto del honor de Daghim, un auténtico golazo que en el noventa y uno rompió la portería a cero de Oblak, que poco pudo hacer ante el obús del jugador danés a bote pronto. Repartió minutos Simeone, hubo un buen tramo de Riquelme, también de Gallagher. Sorloth no consiguió marcar y tuvo buenos minutos Lemar, que se ofreció, combinó, y dio buenas muestras de su inmensa y desaprovechada calidad. Tal vez tenga ahí uno de los retos imposibles el cholo, recuperar a este jugador para la causa. Por lo demás, uno a cuatro, y una clasificación que no ha sido demasiado favorable, porque enfrentará en octavos a un rival difícil que saldrá del cuarteto Celtic, Real Madrid, Manchester City o Bayern de Múnich. Pero para esto todavía queda un mundo.

Foto: atleticodemadrid.com