Canadá gana el 4 Nations Face-Off | OneFootball

El primer 4 Nations Face-Off de la historia ha terminado, envuelto en una gran polémica nacionalista y política, con una victoria de Canadá en Boston. El partido, como era de esperar, fue un auténtico espectáculo que se resolvió con un gol de McDavid en el tiempo extra.

Espectacular victoria de Canadá

Canadá se llevó la victoria haciendo una gran actuación desde el primer momento. Hubo ciertos abucheos al himno canadiense, lo cual quizá les motivó para la victoria. Sin duda, el pilar central de la victoria fue la espectacular actuación del goalie Jordan Binnington, que realizó 31 paradas en total, confirmando que merecía el puesto tras las polémicas por la convocatoria.

Nathan MacKinnon, que a la postre sería MVP del torneo, fue el que anotó el primer tanto del partido, con asistencia de Harley. El tanto del empate vino por obra de Brady Tkachuk, 3:08 antes de que terminase el primer cuarto. Algo parecido ocurrió en el segundo, lo que pasa es que primero se adelantaron los estadounidenses y luego Canadá anotó el empate.

La mala noticia del partido llegó para EEUU con la lesión de Matthew Tkachuk, que no jugó ni en el tercer cuarto ni en la prórroga. Tkachuk tiene una lesión en la parte inferior del cuerpo (no se ha dado a conocer más información) desde el partido entre estos mismos equipos del jueves. Ahora habrá que ver si el center se puede reincorporar a los Panthers y si no puede hacerlo de momento cuando podría.

Finalmente, Canadá se convirtió en campeona con un gol de la gran estrella del equipo, el jugador de los Oilers Connor McDavid. El tanto de la victoria llegó cuando le cayó la pastilla estando solo y, como todo en este deporte, en décimas de segundo la colocó dentro. El veterano Sidney Crosby, de los Pittsburgh Penguins, levantó el trofeo en una victoria festejadísima por los norteños. El héroe de la victoria dijo que «significa mucho para ellos como grupo».

Los jugadores de Canadá celebran el gol con McDavid.

Reacciones

Estados Unidos y Canadá pusieron una «nueva Guerra Fría sobre el hielo», como tituló Associated Press haciendo referencia al Miracle on Ice de Lake Placid 1980, cuando EEUU ganó a la URSS. El entrenador estadounidense, Mike Sullivan, hacía la comparación con lo ocurrido hace 45 años diciendo que «inspiraron a nuestra generación«. Además, dijo que buscaban «hacer lo mismo en las siguientes generaciones».

Todo este tipo de conflictos siempre cogen a alguien entre medias, en esta ocasión, es el forward canadiense Brad Marchand. El jugador de los Boston Bruins, el equipo del TD Garden, dijo que prefería «apartar la política y centrarse en el hockey«. El primer ministro, Justin Trudeau, publicó varios posts en X relacionados con el tema. Uno de ellos, el más destacado, decía que «no podrán quitarnos nuestro país y no podrán quitarnos nuestro juego«.