El Zamora tiene licencia para soñar | OneFootball

Los hombres de Juan Sabas vencieron ante Unionistas en un derbi de los que valen seis puntos

La tarde del 30 de marzo Unionistas de Salamanca y Zamora C.F. se empeñaron en demostrar que los 48 minutos de desplazamiento por la A-66 no son un impedimento si el objetivo es disfrutar de un derbi de categoría.

El reloj avanzaba impasible y el inicio del partido se vislumbraba en el horizonte, pero la comunión entre ambas aficiones había llegado a un grado de complicidad que, por momentos, el fútbol pareció pasar a segundo plano.

Ni siquiera el sol quiso faltar a la cita, un tiempo primaveral daba la bienvenida a todos los aficionados charros que habían tenido a bien desplazarse a la Perla del Duero.

Con los equipos ya plantados sobre el terreno de juego las aficiones trataron de ganar su batalla personal elevando los decibelios en el Ruta de la Plata, la parroquia de ambos clubes cumplió su parte del trato, llegaba el momento de los jugadores.

Todo listo para el pitido inicial // Fuente: Zamora C.F.

El miedo al error hizo que ninguno de los dos equipos se atreviese a tomar la batuta, dejando un arranque de toma de contacto un tanto tibio. El Zamora, sin demasiada convicción, comenzó a ejercer su papel como local al tiempo que sus primeros espadas iban entrando en contacto con el balón.

Unionistas supo cerrar a cal y canto los pasillos interiores obligando a los rojiblancos a probar fortuna con los golpeos de larga distancia, lo cual hizo que pies privilegiados como el de Carlos Ramos no tardaran en amenazar la meta de Martínez.

Con el paso de los minutos Unionistas comenzó a crecer en el partido. Fermín Sobrón desafió a la lógica por enésima vez esta temporada volando para repeler un disparo a bocajarro que se colaba dentro. A penas unos instantes después, mientras la gente seguía con la resaca de la anterior manopla Fermín ya estaba haciendo el spagart para frustrar otra buena intentona charra.

Con esos dos avisos llegó el silbatazo del colegiado que indicaba que era la hora de retirarse a vestuarios, un pitido que sonó como música celestial en los oídos zamoranos ya que los rojiblancos estaban viviendo sus peores minutos sobre el verde.

DESCANSO

Zamora y Unionistas se retiran a vestuarios // Fuente: Zamora C.F.

Con 45 minutos por delante y la sensación de que aún no se había visto la mejor versión de ninguno de los dos equipos se abría la puerta a un nuevo partido.

Un destello de calidad del Zamora estuvo a punto de estrenar el marcador, pero a Sergio Nieto le faltó esa clarividencia que suele desprender con el balón en los pies y terminó echando por tierra un remate franco en frontal de área pequeña.

El ritmo en la segunda parte comenzó a incrementarse como si ninguno de los dos equipos estuviera conforme con el empate. Fermín se vio obligado a volar en un par de ocasiones.

En el minuto 74 una acción lo cambió todo, el siempre eléctrico Tresaco desbordó por banda y forzó la entrada de Mikel García y la correspondiente segunda amarilla.

Con uno más y la afición empujando, saltó al ruedo Kike Márquez. Con el 14 sobre el campo el Zamora ve la vida diferente y, aunque mermado, es capaz de cambiar el transcurso del partido con una de sus genialidades. Instantes después, el torero recibió la pelota, levantó la cabeza y telegrafió un pase a la cabeza de Rufo que la mandó a guardar haciendo que el Ruta de la Plata estallase.

El Zamora, lejos de amilanarse, siguió con la alta intensidad que le había llevado a conseguir esa renta positiva. Rufo estuvo a punto de sentenciar el partido, pero se llenó de balón y terminó definiendo por encima del larguero, por su felicidad y la de todos los rojiblancos el partido terminó con final feliz.

El Zamora ganó tres puntos y una licencia para soñar.