Diario La Escuadra
·03 de março de 2025
Isco se reivindicó contra el Real Madrid
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Diario La Escuadra
·03 de março de 2025
Hace tres años, Isco partió del Real Madrid en busca de una nueva oportunidad donde desplegar una calidad innegociable. Y es que nadie puede poner en duda que el centrocampista del Real Betis posee una técnica al alcance de unos pocos elegidos. Aunque también han sido escasos en número aquellos entrenadores que confiaron desde el principio y ciegamente en los destellos del mago.
Uno de ellos es Manuel Pellegrini. El chileno ya sacó la mejor versión del andaluz en su etapa en el ‘Euro Málaga’ y rescató al niño de sus ojos cuando volvió a LaLiga. Un campeonato doméstico donde parecía que el de Arroyo de la Miel brillaría en un Santiago Bernabéu que lo llegó a ovacionar en varias ocasiones, aunque no las suficientes. En una férrea y larga competencia con James, Bale y Asensio, el malagueño alternaba minutos y era condenado por técnicos como Solari o Ancelotti.
Incluso su gran valedor e ídolo y que presenció el partido en directo, Zinedine Zidane, terminó siendo prácticamente su verdugo. Atrás quedaba aquél jugador innegociable por un Julen Lopetegui que siempre se enamoró de su fútbol. Tanto es así, que el ex seleccionador no dudaba en citarlo con la Selección Española y lo llamó cuando asumió las riendas del Sevilla, aunque su posterior salida al Wolverhampton acabó con la infelicidad de ambos.
A punto de cumplir los 33, Isco ha dejado atrás su última lesión y se ha echado el Benito Villamarín a su espalda, tal y como se vio el pasado sábado ante el Real Madrid. Nada que ver con un Gareth Bale que se retiró a la misma edad, poniendo su mirada en su auténtica pasión; el golf. Tampoco tiene mucho en común con un James Rodríguez que deambula por la liga mexicana, con los mismos años y que salió por la puerta de atrás del Rayo Vallecano, prácticamente sin jugar.
Solo Carlo Ancelotti sabe si se arrepintió de haber dejado partir a un centrocampista que, tras las bajas de Valverde, Bellingham y Ceballos, probablemente habría sido titular la pasada jornada. El malagueño fue una auténtica pesadilla para un técnico italiano que presenció todo un recital del mediapunta. El ahora bético completó 61 pases con un 90% de acierto, fue el máximo recuperador de su equipo y el que más ocasiones generó.
Isco se adueñó del encuentro en el que corrió como el que más, se ofreció, distribuyó y creó a su antojo. Además de asistir a Johnny Cardoso con un centro medido, asumió la personalidad para anotar el penalti que dio el triunfo a los suyos. Ya son 6 goles y 3 asistencias en 15 partidos. Nada que hacer para una medular improvisada del Real Madrid, con un Modric exhausto, Brahim fuera de zona y Tchouaméni desbordado.
La imagen del benalmadense besándose con su pareja, Sara Sálamo, además de recordar al de Iker Casillas a Sara Carbonero, muestra esa felicidad por la que pasa un futbolista que se perdió la pasada Eurocopa y del que seguro Luis de la Fuente tiene en su agenda. Precisamente, su último partido con ‘La Roja‘ fue contra Suecia en el Santiago Bernabéu en 2019. El mismo escenario donde, un año antes, el feudo blanco se emocionó al verlo humillar a Verratti y anotar un doblete a Italia. ¿Volveremos a verlo en la Selección?