Revista MadridistaReal
·10 de novembro de 2024
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·10 de novembro de 2024
A sus 21 años, el central madrileño cumplió el sueño que, en sus propias palabras, “siempre se quiere lograr”: defender la camiseta blanca en un encuentro oficial. Su oportunidad llegó tras la lesión de Éder Militao, y Asencio no defraudó, mostrando carácter y calidad con una destacada asistencia en largo a Jude Bellingham para el segundo gol, que fue ovacionado por la afición.
“Desde pequeñito cuando empecé a jugar al fútbol pensé en este día. Es el sueño de cualquier chico que da sus primeros pasos”, confesó el canterano, agradecido por el recibimiento del equipo. Asencio aprovechó la confianza de Carlo Ancelotti, quien le dio la titularidad antes que a otros defensores como Jesús Vallejo, y describió su estilo como el de un central con carácter, serio y contundente.
Con un 93,5% de acierto en pases, su actuación fue notable, destacando la capacidad para generar peligro con balones largos, una habilidad que ha perfeccionado bajo la tutela de Raúl, su entrenador en el Castilla.
La historia de Asencio en el Real Madrid ha sido de paciencia y dedicación. Desde su llegada en 2017, el defensor ha superado adversidades, incluyendo el escándalo del «Caso Canteranos», en el que, aunque no estaba implicado directamente, su nombre resonó en los medios. A pesar de recibir ofertas del fútbol profesional, eligió quedarse en el segundo filial en la temporada 2022-23, demostrando un compromiso inquebrantable. En 2024, su evolución lo convirtió en un líder indiscutible del Castilla, donde su colocación, contundencia, y habilidad para realizar desplazamientos precisos en largo lo han destacado.
Gonzalo Arroyo Moreno/Getty Images
Durante los entrenamientos, Raúl ha trabajado con Asencio para que use su fuerza y precisión en pases largos, una habilidad que se ha convertido en su sello. En el Castilla, el central suele realizar conexiones en largo con Víctor Muñoz, extremo izquierdo, replicando en el filial la misma fórmula que usó para asistir a Bellingham en su debut. Su capacidad para adaptarse también lo ha llevado a jugar como central zurdo en algunos partidos, mostrando su versatilidad en la zaga.
La conexión con el primer equipo también ha sido sólida. En la pretemporada, Asencio se ganó el respeto y cariño de sus nuevos compañeros, y tras su debut, figuras como Lucas Vázquez, Modric y Bellingham han mostrado su apoyo. Esta cercanía le ha dado confianza para integrarse y crecer en un entorno de alta exigencia.
Ayer, ante Osasuna, con su carácter ha mostrado en el terreno de juego que es un defensor de garantías. Esto junto a su talento y paciencia le han abierto las puertas del primer equipo, y su sueño de ser una pieza clave en el Real Madrid apenas comienza.